Del incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas nos quedará el horror: el eco de las sirenas que serán como aldabonazos en las puertas de la memoria, de levantar la mirada en busca de consuelo y encontrar el gris.
No obstante, también permanecerán los momentos en que los hombres y mujeres demostraron que no solo estamos formados de átomos, sino también de espíritu: los tiznados, los que llevan una cruz roja en la espalda, los pilotos de helicóptero que, cuando se acercaban a la bahía a buscar agua, parecía que se zambullían como ciertas aves acuáticas.
Tanto el horror como el espíritu no deben caer en las trampas de la levedad de la vida, en el mañana que sucede al ayer, hasta que todo se hace más ligero. Y si algo no podemos permitir es la ligereza y la desmemoria.
Por ello, guardar un testimonio gráfico de esos acontecimientos constituye más que un deber, una necesidad, una deuda con los protagonistas.
El incendio intenso de la primera madrugada y el hombre pequeño a contrafuego, a contraluz. La inmensidad cabe en el disparo de una cámara.
Hombres en medio del caos. Hombres de cara a la duda. Hombres que se imponen a la duda y al caos. Hombres que se sobreimponen a la debilidad. Mucho, mucho dolor y mucha, mucha gloria cabe en el disparo de una cámara.
El agua que cae desde un pomo Ciego Montero en el rostro para borrar las señales de la ceniza. El cansancio en el disparo de una cámara. El arcoiris en un cielo límpido sobre la bahía que nos recordó que el mito nos ayuda a vivir, nos llama a seguir.
La esperanza cabe en el disparo de una cámara.
¡ una exposición que muestra la tragedia , la esperanza y los valores de una comunidad fuera de serie.
Nos muestra la Grandeza de un Gran y Hermano Pueblo Cubano. Como el ave fénix se levanta …
Increíble el espíritu de los bomberos cuando ve uno la inmensidad del fuego. Mus respetos a los cubanos, venezolanos y mexicanos por su valor y heroismo.
Entre el Caribe y el Pacífico, veo siempre dos huellas como de un gigante, una al lado de la otra ,pero juntas , imborrables y eternas, entre el humo y el fuego, entre la tormenta, ante la adversidad: México y Cuba , si señor !