Venir a la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), es para el embajador saharaui Omar al Bulsan como visitar “una trinchera de combatientes con mucho entusiasmo y sacrificio”.
Así lo definió el funcionario cuando este 5 de diciembre, en compañía del primer secretario de la embajada de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) en Cuba, Mohamed Lamin Mulay Mehdi, conversó con el presidente de la UPEC Ricardo Ronquillo Bello.
El triunfo que implica narrar la historia real de la causa saharaui está sustentado en lo que al Bulsan consideró como dos medios fundamentales: la prensa y la voluntad para contar.
De ahí que propusiera, al cumplirse, en febrero próximo, 48 años de la proclamación de la RASD, la firma de un convenio de colaboración entre la UPEC y la Unión de Periodistas y Escritores Saharauis.
El acuerdo, similar al pactado entre el Servicio de Prensa Saharaui y la agencia cubana Prensa Latina tendrá como principal encargo, “ajustar las alianzas -precisó el embajador- entre los medios de comunicación para despejar algunas falsedades inscritas sobre la historia de lucha del pueblo saharaui”.
Por su parte, Ronquillo Bello -acompañado por Francisco Rodríguez Cruz, vicepresidente de la organización- destacó la importancia de la idea en medio de un contexto que plantea robustecer las articulaciones con especialistas y estudiosos de la comunicación en otras regiones del mundo, y como prueba de ello mencionó la realización del Coloquio Internacional Patria que celebrará, en marzo de 2024, su tercera edición.
De acuerdo con el presidente de la UPEC, esos pasos forman parte del proceso de modernización que vive el modelo de prensa en el país, bajo la premisa de aprovechar las potencialidades de los recursos tecnológicos en función de expandir el relato producido desde la isla.
“El movimiento solidario con la causa saharaui es uno de los más importantes del mundo”, resaltó Omar al Bulsan y agregó que 84 países de los cinco continentes reconocen a la RASD como una nación soberana.
Dentro de ese grupo de apoyo, “el pueblo saharaui no podrá olvidar jamás la ayuda de Cuba”, enfatizó el embajador al subrayar la acogida a miles de jóvenes y su formación en distintos campos del conocimiento.
Ante todo – según al Bulsan en referencia a la preparación de los estudiantes en la Escuela Latinoamericana de Medicina- se trata de una superación humanista y del desarrollo de un modelo de comportamiento ético incomparable.
Como el bubisher, la pequeña collalba negra del desierto que en el imaginario saharaui porta las buenas noticias y representa la esperanza, el embajador obsequió a Ronquillo un poemario que reúne a escritores contemporáneos integrantes de la Generación de la Amistad. Un libro escrito en español, la segunda lengua de su pueblo y donde se lee un poema de Ali Salem que viene a decir (nos): “Decirles que no hay más espera / que la espera del reencuentro renacido del polvo de la libertad. / Decirles con vuestra voz de fuego y amor / que somos el pueblo saharaui”.
Foto de portada/ De izquierda a derecha: Primer secretario de la embajada de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) en Cuba, Mohamed Lamin Mulay; Omar al Bulsan, embajador de la RASD en Cuba; Ricardo Ronquillo Bello y Francisco Rodríguez Cruz, presidente y vicepresidente de la UPEC, respectivamente.