Muchas veces se ha preguntado si hay un cine latinoamericano o hay una Latinoamérica dentro del cine. Porque a diferencia de las bellas artes precedentes, el cine no es una actividad individual sino una construcción social en la que converge todo un movimiento ideológico y cultural.
La reflexión —de José Rivera Guadarrama, invitado de Diálogos en reverso este miércoles 2 de marzo— respondió a la interrogante de Octavio Fraga, realizador del espacio, cuando le inquirió: ¿Qué define lo estético en el cine y que lo diferencia del resto de las artes?
En su respuesta, el escritor y periodista mexicano argumentó, además, la influencia del contexto de emergencia del llamado séptimo arte, a finales del siglo XIX, y lo caracterizó como una culminación de la modernidad o de la revolución industrial definitoria de la época.
Otra diferencia —precisó— es que la temática de la primera película es muy distinta a las propuestas artísticas previas. “La literatura antigua, por ejemplo, exalta deidades, no habla de seres humanos comunes, sino de personas que tienen dominio sobre otras.
“Pero los hermanos Lumiere filmaron la cotidianidad de personas iguales a nosotros, como en las conocidas escenas de la salida de los obreros de una fábrica y la del niño que interrumpe el trabajo del jardinero cuando le pisa la manguera. Sus películas son el germen del cine”.
En ese sentido, y de vuelta a la contemporaneidad, Guadarrama añadió que si el cine es una construcción social deberíamos ir pensando en cómo construir una ideología social para el cine revolucionario. “Sí, hay ese cine contestatario y podría ser un fuerte elemento emancipador, pero está clandestino, no llega a las grandes salas”.
Hay interrogantes a las que Guadarrama siempre le ha dado vueltas. “¿Por qué nuestro cine latinoamericano no tiene superhéroes?”. Al respecto enfatizó en que todos los superhéroes del cine norteamericano, hollywoodense, hacen que la justicia gane. Y que, por el contrario, los personajes del cine latinoamericano, que son personas reales no llegan a completar su proyecto emancipador. “Aquí la injusticia se impone a los justos y allá la justicia se impone a los injustos”.
En otro momento del diálogo, el entrevistado definió que para él arte es todo lo hecho por un ser humano, con una intención. “Toda propuesta humana tiene una intencionalidad artística; todo arte también es político, si tomamos el término griego polis, que es el lugar donde conviven los seres humanos.
“Entonces, todo arte pone en cuestión a los seres humanos y toda propuesta cinematográfica tiene sentido estético basado en la intención de incidencia dentro de la sociedad o dentro de la polis. Por ello, la estética política hay que cambiarla por una politización de la estética”.
Espere la transcripción de este diálogo, de una hora y media de duración, en las páginas de Cubaperiodistas en días sucesivos.
