Una publicidad distinta en torno a Cuba ha comenzado a llegar a los televidentes estadounidenses, que por más de medio siglo no han recibido más que vituperios acerca de la vida política en la Isla.
No se trata de que los grandes medios (mainstream media) hayan cambiado su orientación hostil, pero el solo hecho de que algunos de ellos hayan admitido –aunque sólo sea como anuncios pagados- una publicidad diferente a la que les ha sido exigida por la élite del poder estadounidense desde el triunfo de la revolución popular en 1959 es una alentadora señal para la ciudadanía de Estados Unidos y, por supuesto, también para los cubanos.
Una nueva coalición bipartidista (republicana y demócrata) denominada “Engage Cuba” (en español sería “Comprometerse con Cuba”), integrada por entidades interesadas en el desarrollo de los vínculos con la Isla que ha surgido en consonancia con los anuncios oficiales de los gobiernos de Washington y La Habana en diciembre de 2014, lanzó la campaña en importantes medios de prensa norteamericanos, criticando las arcaicas prohibiciones que niegan a los ciudadanos el derecho constitucional de viajar y hacer negocios con Cuba.
El anuncio de medio minuto, producido por la firma publicitaria Shorr Johnson Magnus, comenzó a transmitirse el martes 16 de junio en la televisión por cable a través de Fox News, MSNBC y CNBC.
El texto destaca que los estadounidenses son libres de viajar a cualquier parte del mundo – con excepción de Cuba -, y que un estimado de 5,9 mil millones de dólares en exportaciones anuales de Estados Unidos está actualmente bloqueado por la prohibición obsoleta, propia de la Guerra Fría, que impide el comercio con Cuba.
Según palabras de James Williams, presidente de la coalición Engage Cuba, “las encuestas públicas estadounidenses muestran que la ciudadanía está cansada de la política de Guerra Fría que no permite el comercio o los viajes a Cuba. “Es por eso que estamos lanzando esta coalición, porque queremos que nuestro gobierno nos deje jugar un papel significativo en este período de tránsito”.
Engage Cuba participó en la negociación del acuerdo histórico que ha hecho posible que la Sección de Intereses de Cuba y la futura embajada de Cuba en Washington cuenten con servicios bancarios imprescindibles para el actual proceso de normalización.
La coalición apoya el proyecto de legislación conocido como Ley Libertad para Viajar a Cuba (S. 299), de los Senadores Jeff Flake y John Boozman (Republicanos de Arizona), y Patrick Leahy (Demócrata de Vermont), que ya cuenta en el Senado con cuarenta copatrocinadores.
Engage Cuba incluye organizaciones y empresas en todos los sectores y principales grupos comerciales, como el National Foreign Trade Council (Consejo Nacional de Comercio Exterior), National Association of Manufacturers (Asociación Nacional de Fabricantes), Consumer Electronics Association (Asociación de la Electrónica de Consumo), Council of the Américas (Consejo de las Américas), y American Society of Travel Agents (Sociedad Americana de Agentes de Viajes).
También son miembros de Engage Cuba organizaciones de la sociedad civil, como Third Way, CubaNow, Cuba Study Group y el Center for Democracy in the Americas.
Además, Engage Cuba ya está trabajando directamente con empresas líderes que comparten el objetivo de quitar la prohibición de viajar y comerciar con Cuba, como Procter & Gamble, Cargill, Caterpillar, Choice Hotels, el Havana Group, entre otros.
“Cada vez hay más acuerdos bipartidistas, más que en los 54 años precedentes de política de aislamiento que está perjudicando a nuestras propias empresas y a los agricultores”, dijo Steven Law, quien fue jefe de la oficina del ex líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, quien además de presidente de la American Crossroads, sirve ahora como Asesor Principal de Engage Cuba. “El futuro de un compromiso con Cuba ha llegado, y es hora de que el Congreso ayude a dirigir el proceso de transición de esa política.”
“La rama legislativa del gobierno va a tener que empezar a funcionar”, manifestó Lucas Albee, Asesor Principal de Engage Cuba, quien fue jefe de las oficinas de los senadores Mark Warner y Patrick Leahy. “No hay mejor manera de ayudar a que esto suceda que cambiar nuestra política arcaica hacia Cuba. Es un interés nacional nuestro. Y es justo para Estados Unidos y para el pueblo cubano”.
Es incuestionable que los ciudadanos estadounidenses están entre los más embaucados y desinformados del mundo, aquellos cuyo derecho a conocer la verdad es más sistemáticamente bloqueado y manipulado.