Dos noticias tristes llegaron este jueves, una procedente de Cuba y la otra de aquí de nuestro México. Dos compañeras de toda la vida de otros tantos periodistas emprendieron el viaje al éter eterno, realmente estamos consternados y compartimos el dolor de nuestros colegas y todos sus demás familiares.
Desde la mayor de las Antillas nos llegó la noticia del fallecimiento de Fifi, cónyuge del hermano mayor de la Federación Latinoamericana de Periodistas, Felap, Ernesto Vera, quien ostenta el cargo de Presidente de Honor de nuestra organización continental.
Este jueves, de propia voz del querido colega del desaparecido diario El Nacional, Arturo Gómez Castro, a quien todos conocemos como “El Hermanito”, por su trato igual con sus congéneres, nos enteramos de fallecimiento de su señora esposa, Rosa.
Ambas damas, cada una en sus ámbitos, se distinguieron en la solidaridad a las luchas sociales de sus consortes.
La primera se forjó en la batalla latinoamericana de los periodistas, a tal grado, que se reseña, que en el edificio de la calle de Nuevo León de la Ciudad de México, cuando los periodistas latinoamericanos encontraron apoyo y asilo en nuestro país, las oficinas de la Felap, estaban en el primer piso, y en el segundo el del matrimonio cubano, las tertulias eran en este último.
El Hermanito, no es miembro del Club Primera Plana, sin embargo su trabajo por la organización ha sido de más entrega que muchos socios efectivos, y en esas lides siempre lo acompañó doña, Rosa, además puso todo su empeño en preservar el entorno ecológico y social del Fraccionamiento Campestre del Club Primera Plana.
Nuestro recuerdo y perene reconocimiento a Fifi y a Rosa. A Ernesto Vera y a todos los miembros de la Unión de Periodistas de Cuba (Upec); a Arturo Gómez Castro y familiares y amigos, nuestra solidaridad sincera y nuestro deseo de que se recuperen ambos colegas, el primero de su reciente intervención quirúrgica y a ambos, de sus problemas de salud. Sus presencias son indispensables en el gremio.
