La vida, a veces, le abre la puerta de par en par al desconsuelo. En la noche de este 9 de diciembre Diana se nos fue, nos la arrancaron. Diana Lio partió de este mundo y el mazazo de sabernos ajena su sonrisa, de no verla desandando con alegría los pasillos de la Editora Abril extendió la tristeza.
Como dijo el periodista Rafael Grillo en la vigilia realizada este 10 de diciembre en la Abril – no solo la institución que dirigió sino también el hogar que amó, proyectó y transformó junto a sus seis publicaciones seriadas y su departamento de producción de libros – que nos falte Diana significa que se perdió un pedazo del alma de la Editora, y de cada uno de nosotros.
Grillo señaló que Diana era capaz de defender a los amigos de los propios amigos (una situación que consideró más ardua que enfrentar a los enemigos), y hacerlo desde la cercanía personal e, igualmente, en el sentido político.
“Hay muertos que son lejanos, y aún así se nos mueren dentro. Y están los muertos cercanos, esos que nos duelen por todo el cuerpo, en las piernas, en el corazón y hasta afuera, en el paisaje que nuestros ojos miran y que esos ojos queridos miraron también.
“Los golpes te hacen más blando, porque te hacen más sensible, te hacen más humano, te quitan la soberbia y la falta de humildad. Pero también hay que llorar, hay que ser duros. Estamos hoy, aquí y ahora, para dejarla partir y para dejarla quedarse”, expresó.
La periodista Niurka Duménigo, quien durante varios años dirigió la Abril, recordó el ingenio, la perseverancia y, fundamentalmente, la humildad de Diana.
“Es lindísimo ver esta cantidad de gente aquí. El mejor homenaje que va a tener Diana es esto que está pasando, que nos hayamos acercado un ratico para celebrar su vida, para celebrar el resultado de este lugar que tiene mucho de ella, que tantos años trabajó en esta editorial. Ha pasado por tantos lugares que se queda un poco de su esencia en todos ellos. Como decía Grillo, Diana es un poco de Zunzún, un poco de Alma Mater, de Pionero, del Caimán…
“A mí me gusta recordar a Diana en vida, es difícil recordarla de otra manera, 48 años es muy poco tiempo para irse de este mundo en plenitud de capacidades. Creo que lo que todos estamos pensando es que es mejor celebrar su vida y sus resultados, celebrar ese ser humano tan especial que es, y que va a estar dentro de nosotros siempre, en nuestros corazones”.
Rosa Miriam Elizalde, vicepresidenta primera de la Unión de Periodistas de Cuba (Upec), dijo que una semana atrás el presidente de la organización, Ricardo Ronquillo, visitaba la Abril para entregarle al colectivo de la revista Juventud Técnica (JT) el premio obtenido en el Primer Festival Nacional Virtual de la Prensa; y que a su regreso a la Upec habló de la llamada telefónica sostenida con Diana, y de la alegría de esta por el reconocimiento.
Rosa Miriam acotó que no solo se encontraba en la vigilia como representante de la Upec, sino también como la persona que conoció a Diana en una aventura editorial en el año 2000, y a la que luego la unieron diversos proyectos cuando la entonces joven editora estuvo a cargo de sus libros.
“Era esa persona sensible y equilibrada. De las que en las discusiones difíciles que tenemos en nuestro gremio, cuando estamos mirando nuestros problemas, resultaba un alivio saber que estaba allí. Quiero trasmitirles el dolor de sus compañeros que estamos en la Upec, y decirles que es un dolor compartido con todos ustedes”.
Irenia González, integrante del equipo de JT, rememoró las batallas cotidianas de Diana para que en la compleja situación de la poligrafía nacional los libros salieran en tiempo, y para que el espacio físico de la Editora se pareciera cada día más al sueño esbozado por su colectivo.
Mientras, la periodista Iramis Alonso, directora de JT, leyó un mensaje enviado por la periodista Tamara Roselló, quien fue directora de la revista Alma Mater años atrás, donde resaltó la gran impronta que de Diana queda, producto de su energía y pasión.
“Abril y Diana parecen ser lo mismo, por eso será imposible que dejen de estar su alegría e intensidad. Ahora han de multiplicarse entre tantas personas que andamos tristes, extrañando ya su risa y su voz. Deja una obra que hay que seguir amando cada uno de sus días”.
Diana ahora mismo nunca te voy a olvidar.
Diana eres el alma editorial de Editora Abril.
Diana equivale a Editorial Abril siempre fue.
Cuanta pena con esta pérdida, no la conoci personalmente pero si conocia su trabajo, llegue a todos nuestras condolencias con la certeza de que siempre va a estar entre sus compañeros y pueblo en general y en especial en Abril.
Siempre con ustedes, colectivo de la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí
Compartimos mucho en la UJC Nacional y le tuve siempre mucho cariño y respeto profesional. Me estremeció la noticia.
Compartimos mucho en la UJC Nacional y siempre la aprecié con inmenso cariño y respecto profesional. La noticia me estremeció mucho.
Siempre te recodare por tu bella sonrisa.
Diana