Dos conocimientos establecidos —los aerosoles están detrás de la mayoría de contagios por coronavirus y la ventilación es una de las prácticas más recomendadas para luchar contra su propagación— han propiciado la creación de un dispositivo capaz de acelerar este último proceso.
Se trata de una ‘caja’ diseñada por la empresa española Cedrión con el apoyo de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M), informa Rusia Today. “Es un sistema de desinfección del aire, pero también aplicable a materiales, que podría ser capaz de neutralizar al SARS-CoV-2 en una estancia de tamaño medio (entre 30 y 35 metros cuadrados) en poco más de diez minutos.
De acuerdo con el reporte, para funcionar utiliza plasma frío atmosférico, que desinfecta los espacios y superficies e «inactiva casi en su totalidad los virus y bacterias que circulan por el aire».
Añade que el tamaño del aparato es similar al de la torre de un ordenador de mesa. Y al describir cómo desarrolla el proceso de desinfección, el texto explica que el aire ambiental es sometido a un campo eléctrico muy fuerte, “arrancando electrones de las partículas neutras de este y formando iones».
En palabras de Enrique Medina, director ejecutivo y cofundador de Cedrión, “el sistema es capaz de generar hasta 70 especies diferentes, desde rayos ultravioleta a peróxidos, ozono u óxidos de nitrógeno, que producen entre ellos unas sinergias que son las que permiten inactivar virus y bacterias».
Con esta tecnología la empresa española ha diseñado dos aplicaciones diferentes: “una para desinfectar el aire de una habitación con personas en su interior, haciendo recircular el aire, y otra que desinfectaría todo tipo de superficies cuando no haya gente”.
El dispositivo —precisó Medina— ha tenido resultados muy prometedores con coronavirus que solo afectan a animales. “Al probarlo con distintos tipos de bacterias, sobre todo del ámbito de la seguridad alimentaria, alcanzó inactivaciones del orden del 99,99 por ciento en menos de un minuto».
En este sentido, el reporte afirma que las pruebas centradas en el SARS-CoV-2 y otros coronavirus que afectan al ser humano comenzarán en noviembre en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) de Madrid.
Añade que, si la evolución es la esperada, Cedrión tiene previsto tener el sistema certificado y probado a finales de este 2020. Entonces se podría proceder a su instalación en hospitales, colegios, oficinas y cualquier otro entorno susceptible de tener circulación de coronavirus.
(Tomado de Cuba en Resumen)
