La tercera parte de los niños en edad escolar en el mundo, alrededor de 463 millones, no ha tenido acceso a la educación a distancia tras el cierre de los centros educacionales debido a la crisis sanitaria provocada por la COVID-19, informó el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
De acuerdo con la directora ejecutiva de la organización internacional, Henrietta Fore, la gran cantidad de niños que debieron interrumpir por completo sus estudios durante meses representa una emergencia mundial en materia de educación.
En ese sentido, la funcionaria advirtió que las repercusiones sobre las economías y las sociedades pueden durar décadas.
Según el nuevo informe emitido por la UNICEF, cerca de 1 500 millones de niños se vieron afectados por el cierre de las escuelas en los momentos más álgidos de los confinamientos nacionales y locales.
Por medio de datos recopilados en hogares con menores en edad escolar de hasta cien países, la investigación resultó en un análisis representativo a nivel global acerca de la disponibilidad de la tecnología y las herramientas necesarias para la continuación de las clases de manera virtual.
Asimismo, el documento detalla las “notables” desigualdades que existen entre regiones, con una situación crítica en África Subsahariana, donde ni la mitad de los niños en edad escolar dispone de las herramientas necesarias para mantener la preparación a distancia.
Ese panorama disminuye su complejidad en América Latina y el Caribe, si bien la cifra resulta preocupante, pues 13 millones de niños, un nueve por ciento, no han podido continuar con las clases durante la pandemia.
Por otra parte, el informe destaca que los infantes procedentes de hogares pobres y zonas rurales constituyen, con una pronunciada diferencia, los que más probabilidades tienen de quedarse rezagados durante el cierre de las escuelas.
De modo que-resalta el documento-las tres cuartas partes de los niños en edad escolar sin acceso a la educación a distancia viven en zonas rurales.
El análisis pone de relieve además las diferencias en los índices de acceso según el grupo de edad. Alrededor del 70 por ciento de los niños en edad preescolar, el 29 por ciento de los niños en edad de asistir a la escuela primaria y el 24 por ciento de los niños del primer ciclo de secundaria, no pueden acceder a la educación a distancia.
Ante tan complejo contexto, la UNICEF insta a los Gobiernos a priorizar la reapertura de las escuelas en condiciones de seguridad cuando comiencen a disminuir las restricciones de los confinamientos, al tiempo que considera que las prácticas y políticas de apertura deben incluir la ampliación del acceso a la educación, sobre todo para los grupos marginados.
Finalmente, la organización defiende que los sistemas educativos deben “adaptarse y diseñarse de manera que puedan soportar profundas crisis” tras el “panorama alarmante” condicionado por la precaria educación a distancia durante el cierre de las escuelas y la previsión de que dicha situación empeore.
Tomado de Cuba en Resumen