El Instituto Finlay Vacunas (IFV), del Grupo BioCubaFarma, es una de los centros científicos cubanos que trabaja en el diseño de una vacuna específica contra el nuevo coronavirus, aunque este es un proyecto para el que se requiere complementar potencialidades interinstitucionales. En este sentido, el IFV ha establecido alianzas con la Universidad de La Habana y con el Centro de Inmunología Molecular.
“Estamos trabajando en varios proyectos, a partir de las plataformas tecnológicas en las que se basa la fabricación de otras vacunas comerciales que tenemos en la institución. Aprovechamos estas plataformas para poder llegar a un candidato específico contra el SARS-CoV-2”, explicó en el programa Entrevista, de Cubavisión Internacional, la Doctora Darielys Santana, investigadora Jefa del Laboratorio de Generación de Moléculas Glicoconjugadas, del IFV.
El equipo está muy motivado —dijo Darielys—, y consciente de que, en este proyecto el tiempo es un reto esencial.
Asimismo, expuso cómo antes de la pandemia el periodo considerado para poner a punto una vacuna superaba los diez años y que ahora tiene que ser acortado, aunque es preciso contar con el necesario para comprender profundamente este virus, sus mecanismos y las opciones posibles para el diseño de un candidato factible.
La Doctora Santana añadió que ahora se suma otra complejidad: “Además de funcionar en la población general, esta vacuna debe hacerlo en los adultos mayores de 60 años, que es la población de mayor riesgo a evolucionar a las formas graves de la enfermedad. Pero en este grupo la senescencia del sistema inmune impone retos a los efectos de las vacunas”.
El IFV es responsable de continuar produciendo las vacunas que sistemáticamente pone a disposición del Programa Nacional de Vacunación, por lo que, además de garantizar este suministro, la institución ha constituido un equipo multidisciplinar dedicado al diseño de la vacuna específica contra la COVID-19, del que forma parte esta joven científica.
“Trabajamos intensamente, sin mirar horarios. Queremos responder al llamado del país de poner a disposición una vacuna que nos proteja de este virus, que ha demostrado ser bastante agresivo”, dijo Darielys.
Los jóvenes del Centro —agregó— nos sumamos a este proyecto desde el principio, cuando participamos en la vacunación de con primera dosis de la VA-MENGOC-BC a más de 19 mil personas en menos de 30 días, una intervención encabezada por el IFV para estimular la inmunidad innata en individuos con mayor riesgo epidemiológico.
“Fue muy reconfortante y una experiencia que nos ha marcado la vida, porque nosotros siempre estamos en los laboratorios y casi nunca cerca de los destinatarios de lo que hacemos. Y, de pronto, recibimos de las personas a las que atendimos libros dedicados, comentarios en Facebook; recibimos mucha gratitud, y también hacia el sistema de salud y hacia la ciencia cubana. (Tomada de Cuba en Resumen).
Este covid esta haciendo cuantiosos estragos en Todo el mundo, tuve la desgracia de verlo de cerca cuando dutamtw i visita a Bilbao quede atrapada en este país sin poder volar a casa. La vacuna es la única opción y estoy orgullosa que un país del 3er mundo como el nuestro este enfrascado en buscar solución definitiva a tanto dolor y muerte. Felicidades!!!!!!
Gracias Flor por ayudar a divulgar el trabajo que hacen los científicos cubanos y en especial los del Instituto Finlay de Vacunas.