La cancillería de Cuba desplegó este lunes una jornada de denuncia en las redes sociales contra los efectos del bloqueo económico, comercial y financiero que Estados Unidos impone a la isla desde hace casi 60 años, a la cual se unieron importantes voces de todo el mundo.
“Hoy (lunes) estaremos compartiendo las denuncias contra el bloqueo de Estados Unidos hacia Cuba, desde todos los continentes, porque el bloqueo mata. En Twitter, Facebook, Instagram, WhatsApp. Únete al reclamo de la comunidad internacional contra esta genocida política”, tuiteó la directora de Comunicación e Imagen del Ministerio de Relaciones Exteriores de la isla, Yaira Jiménez Roig.
La campaña en las redes sociales fue identificada con las etiquetas #El Bloqueo Mata y #TheBlockadeKills, a las que respondieron un numeroso grupo de internautas desde varias regiones del planeta para expresar su solidaridad con el reclamo del país caribeño.
El ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, tuiteó: “El bloqueo de Estados Unidos es el principal obstáculo al desarrollo de nuestro país y al bienestar de todos los cubanos. Es una política cruel, inhumana, genocida. Ha dañado al pueblo de Cuba durante demasiado tiempo. Reclamemos su levantamiento inmediato”.
La campaña incluye opiniones de importantes líderes mundiales, intelectuales y activistas de varias regiones del planeta, entre ellos Antonio Guterres, secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU); Michelle Bachelet, alta comisionada de Derechos Humanos; Hilal Elver, relatora especial sobre Derecho a la Alimentación, y Luiz Inácio Lula da Silva, ex presidente de Brasil.
También se pronunciaron el eurodiputado Manuel Pineda, la economista uruguaya Gabriela Cultelli, la cineasta argentina María Torrellas, el fotógrafo Bill Hackwell y el periodista y escritor Stephen Kimber, ambos de Estados Unidos, así como el británico Rob Miller, director de la campaña de solidaridad con Cuba en Reino Unido.
Según cifras oficiales, los daños acumulados por el bloqueo durante casi seis décadas ascienden a 922 mil 630 millones de dólares, tomando en cuenta la depreciación del dólar frente al valor del oro.