Estados Unidos abandona el “mundialismo” y abraza el “patriotismo”. El discurso de Trump en la ONU estuvo lleno de retórica nacionalista. Justificó la guerra comercial contra China y aseguró que Estados Unidos no iba a “pedir perdón” por defender sus intereses.
Aunque hablaba en Naciones Unidas, pocas instituciones mundiales quedaron fuera de los ataques de Trump. Ni el Consejo de Derechos Humanos, ni la Corte Internacional de Justicia ni los organismos encargados de los derechos de los migrantes, satisfacen los gustos del presidente republicano, quien afirmó que Estados Unidos no cedería su soberanía ante espacios “burocráticos” administrados por la ONU.
Volvió a amenazar con dejar de cumplir las obligaciones económicas de su país con la organización, porque supuestamente son “injustas” con la primera potencia mundial.
A Cuba solo la mencionó para hablar del supuesto fracaso del socialismo, pero los más de 130 discursos de mandatarios internacionales que lo seguirán en la Asamblea Nacional estarán llenos de problemas sistémicos que no tienen nada que (ver con el socialismo.
¿Culpará el magnate neoyorquino a Carlos Marx por la miseria en África o la desigualdad de América Latina? Incluso en su ciudad favorita, Nueva York, hay quien puede tener una opinión muy distinta sobre la superioridad del capitalismo frente al socialismo. (Publicado por Dominio Cuba)