Fotos: Yoandry Ávila
Casi como a un igual, sin dejar de lado el respeto y la admiración, los cubanos han sido capaces de traer a su manera de ser, franca y sociable al Papa Francisco, cuando hasta incluso en una canción infantil cantada a su llegada la Iglesia de Reina, le dicen “Pancho” y el “Panchito de los niños”, comentaron en la sala de prensa algunos colegas.
Como era de esperar, una bulliciosa y masiva colectividad de vecinos de Centro Habana, le esperaban y vitoreaban a su llegada a la majestuosa iglesia donde ofician sacerdotes jesuitas, de la misma denominación que el Sumo Pontífice.
Dijo una periodista cubana que hasta habían coreado “qué paso más chévere el de Francisco, eh”, y “eso que aún estamos en la capital”, dijo Juana Carrasco,” verás cuando llegue a Santiago de Cuba”.
La prensa nacional y extranjera compite en eso de subir minuto a minuto lo que va sucediendo durante esta histórica e importante visita del primer Papa latinoamericano, y la cobertura informativa abarca por igual a medios tradicionales impresos, emisoras y señales de radio, de televisión, y sobre todo, digitales que han colocado la estancia de su Santidad Francisco en la cúspide de la noticia mundial en estos días.
Muchos se hacen eco de las facilidades creadas para el trabajo de la prensa, en la Sala 1930 del Hotel Nacional de Cuba, con servicio gratuito de Internet mediante WiFi, teléfonos, 120 posiciones cableadas, 40 de estas con computadoras, señal de televisión por internet y dos grandes monitores para la trasmisión en vivo del programa del Jefe del Estado Vaticano. Muchos filman imágenes del Papa, Raúl y de otras personalidades y sitios visitados por esta vía.
De hecho, la cifra ofrecida por la Dirección de Prensa, Comunicación e Imagen de la Cancillería cubana, de 194 medios presentes, provenientes de 30 países, entre los cuales abundan los principales medios estadounidenses, -teniendo en cuenta que el recorrido del Sumo Pontífice de la Iglesia Católica continuará por el vecino país del norte-, avala la difusión de esta visita a Cuba, donde también los corresponsales permanentes de publicaciones periódicas, agencias y cadenas de radio y tv muestran sus competencias.
A las provincias de Holguín y de Santiago de Cuba, comprendidas en el recorrido del Santo Padre, viajan numerosos medios internacionales nacionales, aunque ya algunos órganos de prensa nacionales y territoriales, tienen ubicados en esas sedes sus reporteros y fotorreporteros para garantizar la continuidad de la comunicación del trascendental suceso.
Acá vimos al Presidente Raúl Castro recibiendo al importante visitante, y la ceremonia de saludo del batallón de ceremonias del Consejo de Estado; la salida en el Papa móvil por avenidas habaneras hasta alcanzar la calle de Reina, donde muchas personas aguardaban su paso, y una gran aglomeración apretaba la Iglesia de Reina, donde se pensaba y así fue que el Padre Mayor haría un alto.
La llegada a la iglesia de la Catedral de La Habana, donde ofició la ceremonia en las Vísperas delante de sacerdotes, diáconos, religiosas y religiosos, seminaristas, personas consagradas, provocó un alto en la labor de muchos de los periodistas , cuando el coro, como de ángeles, entonaba hermosos cánticos. Más aún cuando Su Santidad dejó a un lado la homilía que traía escrita para charlar con los presentes. Risas, asentimiento, admiración creciente.
Llegado a Cuba como Misionero de la Misericordia, el Papa Francisco recibe de autoridades del gobierno cubano, de sus homólogos religiosos, de personalidades, pueblo y también de la prensa que da cobertura a su amplio programa de visita, un animoso y comunicativo abrazo, que se traduce en la alabanza a sus palabras y presencia.
