El periodista cubano Alberto Rodríguez Fernández falleció en La Habana en la noche de este domingo, 21 de agosto, a la edad de 65 años, como consecuencia de un infarto cardíaco y posterior accidente cerebrovascular.
Militante del Partido Comunista de Cuba y miembro desde 1968 de la Unión de Periodistas de Cuba, el compañero Alberto se encontraba jubilado luego de laborar durante los últimos años en la revista Bohemia.
Nació en 1950 en Las Tunas. Comenzó su labor como periodista en 1968 en el periódico Sierra Maestra de Santiago de Cuba, tras pasar un curso emergente para corresponsales. Se graduó en 1976 de Licenciado en Periodismo de la Universidad de Oriente.
Fue delegado al III Congreso de la Unión de Periodistas de Cuba que se celebró en junio de 1974, organización a la que había ingresado en 1968 y que, en 1994, le entregó la distinción Félix Elmuza, su máxima condecoración.
Alberto se mantuvo laborando en el periódico Sierra Maestra hasta 1976; allá fue fundador del periódico Trinchera Azucarera, editado durante la zafra del 70 para los centrales azucareros de Oriente, y del diario Recta Final, que se imprimía en Holguín.
En aquel propio año, abrió la oficina provincial de la entonces Agencia de Información Nacional (actual Agencia Cubana de Noticias / ACN) en Las Tunas, en la cual se desempeñó como corresponsal jefe y luego se trasladó para La Habana. En 1978 fue fundador de la corresponsalía de la AIN en la capital, y editor en la oficina central hasta 1984.
Después pasó al Semanario Granma Internacionalista y más tarde a la Redacción Nacional del diario Granma; posteriormente, al semanario Granma Internacional.
Participó en coberturas de importantes eventos internacionales, Congresos y actividades de primer nivel con la presencia de los máximos dirigentes de la Revolución. También colaboró como jurado en varios concursos periodísticos y en la edición de textos para la Upec.
De 1990 a 1992, cumplió misión de colaboración en la República Popular Democrática de Corea. Al término de la encomienda, le fue conferida la Orden de la Amistad de 2do grado. En esta etapa fungió como colaborador de la Agencia Latinoamericana de Noticias Prensa Latina.
Los últimos tres lustros de trabajo, Alberto ocupó la jefatura de redacción y edición en la revista Bohemia, hasta su jubilación, a finales del año 2014.
Llegue a sus familiares, amigos y compañeros de trabajo, particularmente a nuestra colega Zenaida Ferrer Martínez, nuestras condolencias por tan sensible pérdida.
Presidencia
Unión de Periodistas de Cuba
RECORDANDO A ALBERTO, EL QUERIDO COLEGA
Entre los periodistas que se presentaron temprano este lunes para rendir tributo a Alberto en la funeraria capitalina estuvo Antonio Paneque Brizuelas, quien fuera su compañero de trabajo en Granma Internacionalista y Granma Internacional, entre otros medios de prensa.
Paneque recordó que su amigo Alberto practicó todos los géneros dentro del periodismo, con alta calidad y lirismo, en especial la crónica y el reportaje y resaltó sus aptitudes y desempeño como editor, corrector de estilo y responsable de Redacción, funciones que muchos consideran ingratas y que no tienen la misma visibilidad o proyección que el reporterismo, pero que sin embargo él las realizaba con mucho gusto y decoro.
Militante desde 1966 de la Unión de Jóvenes Comunistas, Alberto Rodríguez integraba al morir un dúo de destacados militantes del Partido Comunista de Cuba junto a su esposa, Zenaida Ferrer, directiva de nuestra Unión de Periodistas de Cuba.
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