Este lunes se cumple una década de la desaparición física de Antonio Eddy Martin Sánchez, locutor y comentarista deportivo que, por más de 55 años, narró muchos de los momentos de mayor emotividad del deporte y la historia de Cuba.
Hasta la necrópolis de Colón, donde reposan sus restos, acompañada de amigos y compañeros de trabajo llegó su hija Sandra para rendirle tributo y depositar una ofrenda floral a nombre de sus coterráneos camagüeyanos.
Para ella, su padre continua siendo su guía espiritual-profesional: “Mi pequeña, prácticamente sin conocerlo, lo tiene en un pedestal por las anécdotas que escucha. La niña dice que su abuelo no fue famoso, si no, que fue un gran hombre. Eso me hace sentir muy orgullosa de ser su hija, y saber que fue tan querido por las personas”.
Frente a la tumba de Eddy, su colega y amigo José Luis Basulto, resaltó las cualidades innatas del maestro de la locución deportiva cubana, quien con solo 19 años se labró un camino triunfal en La Habana. Él se destacó por su capacidad de locutor, periodista y narrador-comentarista deportivo, lo cual le granjeó el respeto y admiración de millones de personas, aseguró.
Eddy Martin narró para su pueblo siete Juegos Olímpicos, 11 Panamericanos, diez Centroamericanos y del Caribe, 17 campeonatos mundiales de Beisbol y 45 Series Nacionales de esa disciplina, y cinco mundiales de Boxeo, también comentó José Luis Basulto.
Durante los primeros años de la Revolución triunfante, trabajó como maestro de ceremonia en los principales actos que se celebraron y acompañó a importantes dirigentes en sus viajes a otros países incluidos Fidel Castro, Osvaldo Dorticós y Raúl Roa García.
En el recuerdo de los cubanos perdurará por siempre la voz e imagen de Eddy Martin y su famoso dúo con Héctor Rodríguez, hombres que hicieron de la narración deportiva su razón de vivir, coincidieron en afirmar los asistentes al homenaje póstumo.