“Ricardo es, y será para siempre, uno de los grandes editores del periodismo revolucionario cubano. Un curador riguroso y entusiasta hasta el desespero de las buenas y atrevidas historias de vida y de noticias insólitas, que se extrañan con nostalgia en las páginas y hasta en las webs de nuestra actual prensa escrita”, así dijo José Alejandro Rodríguez, Premio Nacional de Periodismo José Martí al hablar de Ricardo Saénz Padrón, el Gallego, como cariñosamente le llamaban; el periodista sanguíneo y a la vez tierno, humilde, respetuoso…el maestro de muchos de quienes se reunieron este 11 de julio, en la sede de la UPEC, para recordarlo a propósito de la entrega de los premios del concurso ramal de la prensa escrita que lleva su nombre.
Para Pepe Alejandro, Sáenz Padrón, prestigia y desafía a este concurso para que no caiga en zonas de confort y acomodaticias y superficiales selecciones de premios y menciones”.
Y, en parte, eso sucede por algo que la periodista Marina Menéndez, desde la certeza de que no fue su amiga, sino su aprendiz, resaltó en el collage de voces que esbozaron su personalidad: “Ricardo es una época del periodismo cubano”.
Fue -continuó Pepe Alejandro- un impulsor del buen periodismo- y asumía aquella responsabilidad desgastante con gran sacrificio y devoción; él se realizaba guiando y perfeccionando el talento ajeno, tras bambalinas y delante de ellas también.
De ahí que muchos de los presentes lo describieran de una manera tan familiar, desde la sinceridad que Tubal Páez destacó de su carácter, la humildad y la decencia que resaltó Milagros Escobar hasta la profesionalidad y el talento del que habló Juana Carrasco cuando expresó que Ricardo fue también “una de las mejores personas que me enseñó a hacer periodismo”.
Se trata –subrayó el periodista Osvaldo Rodríguez Martínez, de Prensa Latina- de asumir su espíritu en la prensa: “Nos harían falta muchos Ricardo en los medios cubanos”.
Con la presencia de sus hijas Diana y Yohana, así como de la vicepresidenta primera de la UPEC, Bolivia Tamara Cruz, se anunciaron los premios del concurso ramal en la edición del 2024.
A continuación publicamos el acta y las consideraciones del jurado:
El jurado del concurso periodístico “Ricardo Sáenz”, integrado por Yeilén Delgado Calvo, Hedelberto López Blanch, Osvaldo Rodríguez Martínez, Pelayo Terry Cuervo, Yurisander Guevara, Gilberto Rabassa, José Luis López, Roberto Garaycoa, y presidido por José Alejandro Rodríguez, acordó:
Otorgar el Premio en la categoría de reportaje, a Los rostros del silencio gritan, de Daniel Martínez y Jorge Luis Coll, del periódico Trabajadores, por el valiente reflejo de un serio problema social que enfrenta Cuba hoy, con el manejo atractivo de las características expresivas del género, y la diversidad de voces institucionales y ciudadanas.
También otorgó menciones a El largo camino por el derecho animal en Cuba, de Gabriela Orihuela, de la revista Alma Mater; y a Jóvenes científicos: en la nebulosa de Andrómeda, de Igor Guilarte Fong, de Juventud Técnica.
En la categoría de Información, acordó premiar a Fidel Benito Rendón Matienzo, de la Agencia Cubana de Noticias, por Un ejercicio de control y futura ley para ordenar los campos de Cuba, publicada en el portal Cubahora, por el abordaje de varios temas cruciales e interrelacionados del descontrol en el sector agropecuario cubano, con manejo de datos elocuentes de diversas fuentes, que revelan una búsqueda acuciosa.
En el periodismo digital, acordó otorgar el premio al primer podcast elaborado por Radio Violeta, emisora en línea creada por la Editorial de la Mujer, y que fuera realizado por Gabriela Orihuela, Gabriela Milena Padrón Morejón, Aime Sosa Pompa, Bolivia Tamara Cruz Martínez, Yirmara Torres Hernández, Marilys Zayas Shuman e Isel Quintana Freyre.
Este podcast, dedicado al XI Congreso de la Federación de Mujeres Cubanas, aborda con integridad la problemática de la mujer cubana a través de opiniones de entrevistados, quienes, en un balance objetivo, reconocen logros en el tratamiento al género femenino y advierten los problemas aún persistentes.
La conducción, realización del sonido y edición bajo reglas de las técnicas radiales, complementan la exquisitez de la entrega y hacen más potable la escucha de los más de 20 minutos del material.
En Periodismo gráfico, se acordó premiar el fotorreportaje El fantasma persiste en la memoria, de Yasset Llerena Alfonso, de la revista Bohemia, por la belleza y capacidad de sugerencia, y el manejo atractivo de la complejidad de las luces en el escenario, de la puesta en escena de una obra.
En caricatura, el lauro es para La Guillotina, de Enrique Lacoste, de Palante, por la relevancia estética y el simbolismo que entraña, en un mensaje de alerta universal sobre el peligro que corre hoy la humanidad.
