“Otro golpe de la vida. Otra herida difícil de cerrar porque cuando de amigos-hermanos se trata ni siquiera el tiempo alivia”, así escribió en su perfil en Facebook, Alina López Ochoa al lamentar este 13 de diciembre, como otros tantos amigos y colegas del gremio, la muerte del periodista Alberto Gutiérrez Walón, a causa de un infarto masivo.
“La noticia – continuó Alina- es aplastante porque hay seres a los que uno otorga el don de la inmortalidad sin contar con la anuencia de la vida. Hablo de un profesional de talla mayor, de un ser excepcional, de un cubano extraordinario”.
Por su parte, el vicepresidente de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), Juan Carlos Ramírez Heras evocó la felicidad de Gutiérrez Walón al recibir, este 12 de diciembre, la moneda 60 aniversario de la UPEC por su destacada trayectoria como miembro de la organización.
El fotorreportero del periódico Granma, Juvenal Balán sumó sus condolencias: “Hoy es un día negro. No ha parado de llover, inundaciones y fuertes descargas eléctricas con sonido de desastre.
“Quizás fue el momento de la partida de este hermano, el güinero, quien desde su terruño hizo periodismo en todas las manifestaciones, radial, impreso, TV, agencia y lo más importante, fue un hermano. Por última vez escuché su voz cuando desde el Congreso de la UPEC lo llamamos y charlamos con él Fulgueiras y yo. Es duro, un amigo se va…”
Para Yudaisis Moreno Benítez, directora de el artemiseño, “la muerte siempre acaba aunque dé una vida de ventaja” y así sucedió con Gutiérrez Walón a quien recuerda como “el colega de Diario Mayabeque con quien confraternizamos hace menos de una semana; el del del abrazo apretado, pues la radio en La Habana y la Agencia Cubana de Noticias en las dos nuevas provincias también nos unieron”.
“Me cuesta decir que descanses en paz”, escribió en una crónica, la periodista Maricel González. “Sigue camino y adonde vayas demuestra que eres eterno, reparte alegría y jaranas sin límite”.