Antes de las reuniones editoriales—los martes, cada 15 días, como si fuese un ritual— parte de la tropa espera la cita en la redacción y en esos 15 minutos reímos, bromeamos jocosamente de cualquiera de nosotros o de los últimos avatares tecnológicos de la Ñeca (Angélica Arce). Luego, antes de bajar al salón en el que intentamos “arreglar el mundo”, alguien pide “una foto de familia”.
Después de siete años en la tropa, son muchas las instantáneas que guardo en la galería del teléfono, y de cada una de ellas tengo un recuerdo y cientos de risas.
La tropa, como cualquier familia, es un poco sui géneris, con personas distintas que encajan unas con otras. La tropa no es perfecta y en siete años muchos se han ido; otros han llegado. Los que estamos dentro sabemos que funciona como un mecanismo perfectamente sincronizado y, detrás, engranando cada pieza, está la mano de Randy, quien lo mismo edita a las tres de la mañana que escribe a esa hora un artículo de opinión.
Las coberturas en la Asamblea Nacional del Poder Popular son hasta las 9 de la noche, las transcripciones de la Mesa Redonda, los Minuto a Minuto, el hedor a petróleo en la ropa después de bajarnos del Lada, el café en las reuniones, o un grupo en Telegram donde lo mismo se coordina un trabajo que se habla de la inflación, han sido ingredientes fundamentales de ese pegamento que nos une.
En la tropa, cuando pasa algo: ciclones, catástrofes, accidentes…nadie necesita ser convocado porque todo el mundo sabe lo que hay que hacer. La noche del 26 de septiembre, cuando Ian se acercaba a la provincia de Pinar del Río como un huracán de categoría 3, el Minuto a Minuto no paró hasta que el último de nosotros tuvo un uno por ciento de batería en el celular.
La tropa, la familia, Cubadebate, cumple este 5 de agosto 20 años. Muchos inquieren por estadísticas, alcance, visitas, el Ranking de Alexa o el posicionamiento en las redes sociales. A veces los números asustan.
Cuando alguien pregunta cuál es la clave, cómo lo hacemos, respondo que Cubadebate es su gente, sus periodistas, su personal de apoyo, Randy, Oscarito, Edilberto… La clave es esa, ser una tropa, y antes de todo, una familia con unas ganas de comerse al mundo que pocas veces he visto, que no se detiene ante las carencias materiales, que se reinventa, que se equivoca en un titular, que recorre La Habana por una entrevista, o planta la cara cuando defiende un argumento escrito en un reportaje.
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A solo un año de los sucesos de las Torres Gemelas en New York, en el 2001, se incrementó la supuesta lucha contra el terrorismo del gobierno de los Estados Unidos, principalmente contra Cuba, al estar incluida en la lista de países terroristas, junto a Afganistán e Irak.
En este escenario era imprescindible crear un medio de expresión de periodistas cubanos y de otras nacionalidades, comprometidos, con espacio para el intercambio sobre el terrorismo y las campañas de difamación organizadas contra Cuba.
En marzo de ese año, EE.UU. había emprendido la guerra contra Iraq, y se detuvieron en Cuba 75 personas que colaboraban con la Oficina de Intereses en La Habana. En Miami, se acababa de producir la única manifestación que hubo a favor de la intervención de ese país en Iraq, y en las imágenes difundidas aparecían carteles que decían “Iraq ahora, Cuba después”.
Bush había declarado su idea de “atacar a sesenta y más rincones oscuros del planeta y entre esos oscuros rincones del planeta estaba Cuba”. En este escenario se hizo una campaña intensa contra la mayor de las Antillas desde los principales medios de comunicación de EE.UU. y en Europa y se amplificó toda una campaña que situaba a Cuba como un estado represivo que había que detener.
Frente a esta situación, fue creado en Cuba el Círculo de Periodistas contra el Terrorismo, porque, además, en ese momento había una campaña de denuncia contra la presencia de Posada Carriles, en Centroamérica primero y después en Estados Unidos.
La primera acción de este Círculo fue crear un sitio que fuera expresión de esa batalla por las verdades del mundo y de Cuba, y convertirlo, según ha dicho Randy Alonso Falcón algunas entrevistas en “un espacio de defensa de la verdad de la Revolución, de combate contra el terrorismo mediático, de denuncia del terrorismo de Estado contra Cuba, de defensa de las causas progresistas, de las batallas por la justicia mundial, para evitar que la mentira se bautizara como un arma mortal contra Cuba”.
El 5 de agosto del 2003 surge Cubadebate, en el Centro de Prensa Internacional de Ciudad de La Habana, con la presencia del entonces presidente del Parlamento Cubano, Ricardo Alarcón. Esta iniciativa fue conducida por un grupo de periodistas cubanos liderados por Randy Alonso Falcón y Rosa Miriam Elizalde.
Se buscó un nombre que promoviera exactamente las intenciones del sitio: un debate desde Cuba que enfrentara las campañas de los medios foráneos. También, porque era un nombre que servía tanto en español como en inglés, para poder llegar al público norteamericano, decisivo en ese combate. De ahí su eslogan Contra el Terrorismo mediático.
Este grupo de periodistas, anteriormente desde el portal Cubasí, había desarrollado y lanzado online el sitio www.antiterroristas.cu, en septiembre de 2002, de conjunto con un grupo de estudiantes de la Universidad Marta Abreu de Las Villas que tenían creada la plataforma Quipus News para la administración de sitios web.
Los periodistas de los inicios poco a poco se fueron reduciendo a apenas dos personas: Randy Alonso y Rosa Miriam Elizalde, que habían comenzado a trabajar juntos en la Oficina de Información del Consejo de Estado, y llevaban el peso editorial, pero sin mucho rigor. El sitio se actualizaba de manera intermitente, no generaba en un inicio contenidos propios y luego comenzó totalmente colaborativo en el que no había ninguna plantilla fija.
Sin embargo, en el año 2008, cuando Fidel Castro comenzó a publicar en exclusiva sus Reflexiones en Cubadebate, los editores reunieron al antiguo consejo editorial e iniciaron un proceso de discusión para la creación de una nueva herramienta técnica, con mejores prestaciones y una nueva interfaz.
En junio de 2009, Cubadebate se trasladó de Quipus News a la plataforma para bitácoras WordPress, bajo dominio propio .cu, donde se mantiene en la actualidad.
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Después de 20 años, tras un proceso de transformación editorial, Cubadebate pertenece a Ideas Multimedios, y los retos y sueños que tenían ese grupo de periodistas que crearon el medio se han multiplicado, a la par que las estadísticas y la exigencia de los lectores.
Los que allí estamos, los que escribimos, los que hacemos guardia editorial 24 horas, los siete días de la semana, estamos conscientes del compromiso y de lo difícil que es hacerlo diferente. En ese afán intentamos seguirle los pasos a Randy, crecer, equivocarnos y aprender, siendo fieles a lo que somos, y acumulando más “fotos de familia” en las galerías de nuestros teléfonos.