El ministro Alexandre de Moraes, del Supremo Tribunal Federal (STF), decidió romper el secretismo que rodeaba las imágenes tomadas por las cámaras de circuito interno que grafican el intento de golpe de Estado de enero, cuando turbas alentadas por el lenguaje de odio del bolsonarismo asaltaron la sede de los tres poderes.
La medida de la máxima figura del poder judicial tiene lugar cuando está en marcha el proceso contra protagonistas de los hechos, y luego de la edición y divulgación, sin autorización, de algunas de esas escenas, donde se observa a un general respetuoso del mandato del presidente Luiz Inacio Lula da Silva entre los asaltantes.
Con ello, comentó Página 12, se busca dar pie a una campaña mentirosa que vincularía a Lula con los sediciosos para alentar la falsa tesis de un intento de autogolpe.
En respuesta, el general Gonçalves Dias, quien fungía como jefe del Gabinete de Seguridad Institucional, presentó su renuncia, aunque las imágenes editadas y divulgadas no permiten inferir la complicidad del exmilitar con los asaltantes.
Según el diario Brasil de Fato, Dias declaró y negó su implicación en los hechos.
Por su parte, Moraes, quien es relator de las investigaciones en torno a los ataques a Planalto, al Congreso y al propio Tribunal Supremo de Justicia, dictaminó el envío a esa corte, en el plazo de 48 horas, de «todos los materiales existentes, observando la preservación íntegra de las imágenes, que será valorada en una investigación posterior, con el fin de preservar la cadena de custodia».
El ministro del Gabinete de Seguridad Institucional, Ricardo Capelli, dijo que con el video editado —que divulgó primero CNN Brasil, el miércoles— se quiso mostrar a las «víctimas del golpe como culpables», siguiendo el método utilizado en el pasado por los fascistas.
Para echar luz sobre lo realmente ocurrido el 8 de enero y demostrar la responsabilidad de los «terroristas (…) estoy tornando públicas ahora todas las imágenes disponibles, se trata de 160 horas de grabación» sin edición, anunció este sábado Capelli a canal TV 247.
Los subversivos apostaron a crear una gran fake news sobre lo sucedido a principios de enero, en el intento de golpe que durante meses fue «alentado» por Bolsonaro, agregó el ministro de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha.
El funcionario consideró que esa «narrativa conspirativa, absurda, terraplanista», será desmentida en la Comisión Parlamentaria Mixta de Investigaciones a ser creada el próximo miércoles en el Congreso.
Con información de Brasil de Fato y Página 12
