Para hacer contrapeso en la Red a quienes articulan la guerra comunicacional contra Cuba a base de mercenarismo, odio, vulgaridad y nulos valores, nuestra Radio Enciclopedia dispone de un colectivo de profesionales que trabajan, justamente, con los mejores sentimientos humanos.
Esa idea de Ricardo Ronquillo Bello, presidente nacional de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), define mejor que cualquier otra el espíritu de la asamblea XI Congreso de la organización, celebrada al calor de la mejor música que se conoce: la serenidad del diálogo.
«Tenemos que pensar la radio y la televisión desde un concepto de industria cultural, que implica cultivar las audiencias y cultivar los ingresos», les dijo Ronquillo a estos «enciclopédicos» de prevalencia femenina al convocarlos a formular su propio diseño para mejores economía y contenidos, al calor de los nuevos caminos de gestión que se abren para los medios de prensa en el país.
A solo un día de haber celebrado los 60 años de la emisora, la directora Luisa Márquez Echevarría y los integrantes de la delegación de la UPEC entretejieron sus criterios con el informe de trabajo 2018-2022 que el periodista Lázaro Sarmiento Sánchez —presidente a la postre reelecto—, leía, de manera que con el punto final ya el balance estaba eficientemente discutido.
El sello hermoso que distingue a la emisora —música instrumental ligera— tiene un correlato periodístico de mucho valor: coherencia con el perfil del medio, noticia en voz no de la fuente o el periodista sino de dulces locutoras, predominio de la nota informativa, la reseña y la crónica breve, pero aun así los reporteros nutren revistas multitemáticas, (se) regalaron por los 60 años un nuevo diseño del sitio web y consolidan la producción de podcasts.
Lastrados, como tantos en el gremio, por el déficit de reporteros y presupuesto, el insuficiente ancho de banda para «pescar» públicos en internet y por la necesidad de computadoras, teléfonos celulares y datos, los profesionales de Radio Enciclopedia disponen en cambio de una instalación hermosa y un adecuado ambiente de trabajo que explica —mientras otros se ven agobiados— su decisión de multiplicar… los planes y las redes.
De cara a las posibilidades que dará el experimento que inicia en la prensa cubana, Radio Enciclopedia, con sus sólidos contactos en el mundo de la cultura, vislumbra filones como la posibilidad de grabación de grupos de música instrumental de pequeño formato, el patrocinio y la publicidad.
Ello entronca con un objetivo que se repite en cada medio de prensa: acceder al público joven desde los nuevos formatos; en su caso con la certeza de que —como defendió la directora— ellos no son una emisora (solamente) musical, sino cultural. Día a día, componen un diccionario… enciclopédico. ¡Y eso implica periodismo!
Ese periodismo especial en asuntos, ritmo y tono es parte del potencial que Lianet Uley Suárez, directora de información y propaganda de la radio cubana, ve en esta emisora para hacer con éxito lo que se ha dado en llamar «radio a la carta», habida cuenta del público que ha conquistado.
Entonces, tanto las perspectivas anunciadas por Ronquillo como los estudios de audiencia y mercado sugeridos por Uley Suárez terminarán fortaleciendo todas las plataformas, que es justamente lo que necesita un multimedio. La prensa cubana, como insiste su presidente nacional, va camino a que todos seamos multimedio.
«Vivimos un momento delicado en lo político, lo económico y lo social, pero también en lo comunicacional. Estamos en la etapa aguda de la guerra comunicacional contra el país, y aun así vamos a cambiar el modelo de funcionamiento para adaptar los medios a las condiciones del siglo XXI», afirmó Ronquillo.
El presidente de la UPEC alentó ideas como la contratación para las redes de estudiantes universitarios de talento que completen puntuales flancos comunicacionales, y el fomento en los medios de youtubers e influencers que, desde nuestras plataformas, expongan y defiendan la verdad de Cuba.
De momento, con 60 años de historia y un relevo muy activo, los profesionales de Radio Enciclopedia sumaron a su galería la obra «El rebelde» —retrato que funde en uno los rostros de Martí y Fidel—, entregada por Ronquillo, y una fotografía que les dio la Federación de Mujeres Cubanas de Vilma Espín, la mujer que —inspiradora rotunda de la emisora— podía dar el más firme mensaje de guerrilla con la voz más delicada de la Sierra Maestra.
