Las mujeres herederas de la memoria de los fusilados por el franquismo es el eje principal de la exposición fotográfica “Paterna, el Paredón de España”.
Una investigación que conmueve, registrada magistralmente a través de la fotografía documental de Eva Máñez, periodista y fotógrafa española, que a través de los relatos de vida de las familiares, saca a la luz el horror silenciado durante tantos años. Cada hallazgo arqueológico en las fosas comunes del cementerio de Paterna, en Valencia, nos habla de lo que fue el fascismo en toda su crueldad y real dimensión.
La exquisita muestra documental que recoge el desgarrador período en la historia del pueblo español fue inaugurada el sábado 20 de agosto en la Fototeca de Cuba, podrá visitarse hasta el 13 de septiembre. A la misma asistieron Alpidio Alonso, Ministro de Cultura de Cuba, Norma Rodríguez Derivet, presidenta del Consejo Nacional de las Artes Plásticas, descendientes de españoles que vivieron la guerra civil, periodistas y el público amante a la fotografía.
“Cuando Maribel Acosta –destacada periodista cubana- nos comentó la temática de la exposición no dudamos en traerla a Cuba. Porque sabemos los estrechos lazos que existen en la historia de nuestros pueblos durante este período”, -destacó Rodríguez Derivet al inaugurar la exposición.
“Que nuestro pueblo conozca a través de estas imágenes los horrores que sufrieron las familias españolas durante el fascismo, es también la manera que tenemos de mostrar la historia no contada”, dijo.
Fueron las mujeres que jamás olvidaron quienes hoy cuentan la historia que Eva nos regala desde un enfoque de género.
La memoria desde el presente para no olvidar el pasado, educar a las nuevas generaciones y preservar el futuro del terror del fascismo y crímenes de lesa humanidad como los que reflejan la muestra.
La fotoperiodista y artista gráfica Eva Máñez declaró que tanto la población como las autoridades sabían de la existencia de estas fosas que contenían los restos de las víctimas de la persecución política franquista. Sin embargo, la voluntad política para que las familias recuperasen los cuerpos de los fusilados y darles un entierro digno fue recién en el año 2016, al amparo de la Ley de Memoria Democrática.
“Las mujeres sabían que estaban allí sus padres, sus hijos o maridos. Durante muchísimos años el ‘Día de todos los Santos’ mujeres de todas partes iban al cementerio a llevar flores, poner velas y honrar a sus muertos”, relata Eva quien también es familiar cercano de uno de los represaliados por el franquismo.
La historiadora Ester López Barceló detalla que: “al abrir las fosas, los arqueólogos destapaban el tiempo que el peso de la tierra había detenido, documentan las huellas del crimen, trazan las posiciones que sus esqueletos han dibujado y recogen sus fragmentos hasta reconstruir el tejido pétreo de los cuerpos. Les devuelven así el nombre, el rostro, la vida y la muerte”.
Eva en un inmenso recorrido -con la investigación como ciencia y la cámara como herramienta documental y artística- a través de las vivencias de las abuelas, viudas, hijas, hermanas y nietas, hilvana detalladamente las instantáneas con la intimidad de cada historia de vida, crea así una inmensa crónica gráfica en rescate de la memoria.
El valor de la exposición, más allá de ser la fotografía documental por excelencia, es el rescate de la memoria contra el olvido, el respeto a las familias transmisoras de una antología de relatos de dolor a través de la búsqueda incansable de sus seres queridos.
Una muestra fotográfica del trabajo de Eva Máñez y el coloquio internacional «La memoria de las mujeres sobre los horrores del franquismo», tendrá lugar este 30 de agosto a las 10 am en la sede de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC).
(Tomado de Cuba en Resumen)
