La tarde de este jueves 28 de abril, en la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), fue una inyección de adrenalina. Un grupo de los alumnos de duodécimo grado que ingresó al Colegio de la Universidad de La Habana (UH) para estudiar periodismo, visitó la sede central de la organización y desde el teatro, a partir de las cuatro de la tarde, la rutina del lugar se corrompió con las inquietudes y testimonios de los estudiantes.
Algunos, incluso, identificaron intereses específicos: el periodismo literario-apuntaron- el fotorreporterismo, el periodismo científico o el económico. Otros quisieran adelantar el tiempo para inocular, como agua, las herramientas de la profesión y “empezar a hacer periodismo”.
Sin embargo, para eso-como les recordó el presidente de la UPEC, Ricardo Ronquillo Bello-urge nutrirse de cultura y sensibilidad.
Aunque conscientes de la necesidad de prepararse y cumplir con los objetivos del duodécimo grado, una de las mayores preocupaciones expuestas por los estudiantes en el conversatorio con miembros de la presidencia nacional de la UPEC, con periodistas y profesores de la Facultad de Comunicación de la UH, estuvo en la ardua preparación que reciben en las asignaturas de ciencias puras; la cual-según expresaron-no se comporta con la misma rigurosidad para las asignaturas de letras.
Sobre esa inquietud, los profesores explicaron que, en el segundo semestre, se impartirán un conjunto de asignaturas seleccionadas por el claustro de la carrera de Periodismo y por la Comisión de Carreras capaces de fortalecer habilidades necesarias para su formación como periodistas.
Lo que se busca-precisó Ronquillo-es que lleguen a la Universidad con una preparación básica de excelencia que les permita apropiarse de los conocimientos de la carrera.
“Vayan a las galerías de arte, estudien idiomas, lean, aprovechen el tiempo para acumular conocimiento y cultura”, remarcó el presidente de la organización. Y justo con esa matriz de opinión coincidió el periodista Abdiel Bermúdez Bermúdez cuando agregó: “Este es el tiempo para equivocarse, para aprender a debatir”, para armarse de los instrumentos imprescindibles que permitan construir un discurso coherente y fundamentado para las diferentes audiencias.
“No los vamos a dejar solos”, dijeron los vicepresidentes de la Upec, Jorge Legañoa y Ariel Terrero y lo reafirmaron también las periodistas Zenaida Costales y Krystel Aspillaga, al destacar la importancia de que converjan, por un lado, la voluntad institucional para apoyarlos y por otro, el interés en la superación profesional.
Al final, en el periodismo-sentenció la Doctora en Ciencias de la Comunicación, Zenaida Costales- “lo importante es tratar de hacer el cuento, de buscar las historias de vida, de saber construir el relato que nace en la cotidianidad” y se expresa en cada persona de una manera diferente.
Pero, para armar ese cuento-enfatizó-es imprescindible tener cultura. “Hay que estudiar, hay que estar siempre con la mirada alerta, hay que aprender a escuchar y así descifrar las emociones de cada persona”.
Las palabras de Ronquillo fueron tomadas bien en serio cuando dijo que, a partir de ese momento, la casa de la prensa también era su casa. Dos horas después de su llegada, los estudiantes inundaron el vestíbulo, las escaleras, el jardín de la entrada, contaminaron el ambiente con los deseos de hacer y fundar, pero primero de instruirse, pues como les dijo Abdiel Bermúdez, “no es el momento para definir en cuál tipo de periodismo especializarse, sino para aprender de todo”.
