De acuerdo con el periodista y director del programa Temas y Debates, Eliecer Mora, de Nicaragua, la prohibición constituye una manera de coaccionar y frenar la transmisión objetiva de esos medios de comunicación y viola el derecho a la información, recogido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
«Le temen a la verdad y, obviamente, a que las noticias que venden al mundo mediante la hegemonía y control de plataformas a su servicio queden expuestas como mentiras ante la comunidad internacional. Con ese dictamen pretenden detener el alcance de RT y Sputnik y silenciar su mensaje», señaló a Prensa Latina.
A juicio del experto nicaragüense, esos canales reflejan la situación real en Ucrania, los motivos de la operación pacificadora impulsada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, con el objetivo de prevenir una catástrofe a gran escala y detener la militarización de ese país, el terrorismo y el genocidio impulsado desde 2014.
«La disposición forma parte de un paquete de sanciones que incluye, entre otras medidas, el cierre del espacio aéreo de la Unión Europea para aviones de propiedad rusa y advierte sobre la ineficiencia de su propia maquinaria propagandística. Si tienen que bloquear a esos emisores de noticias de la nación euroasiática significa que sus voceros no tienen el impacto deseado», indicó.
Según Mora, durante todas las invasiones protagonizadas por Estados Unidos, la Unión Europea y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), los gobiernos de esos territorios utilizaron la misma receta de censura para esconder asesinatos contra los civiles y la destrucción a los patrimonios históricos.
«También intentaron intervenir en Nicaragua, a partir del financiamiento a la desestabilización interna. Pero el gobierno encabezado por Daniel Ortega no cede su soberanía ante Washington. Como periodista condeno el acto bochornoso, vil y calculador de limitar las transmisiones de RT y Sputnik», sentenció.
Mordaza a la libertad de prensa
En exclusiva a Prensa Latina, Carlos López Tinoco, director del Portal Digital El Tayacán y secretario general de la Confederación Judicial de Nicaragua, argumentó que cualquier iniciativa mediática consagrada a la censura de pensamientos o noticias resulta riesgosa para el libre ejercicio del periodismo objetivo y veraz.
Para el comunicador, ambos medios «no poseen intereses injerencistas y maquiavélicos de destrucción psicológica masiva, ni se arrodillan frente a las grandes corporaciones económicas», de ahí la arremetida contra ellos por las potencias y organismos, autodenominados como demócratas.
«La suspensión de las cadenas rusas es un abuso de poder, un acto cobarde y supone un pésimo mensaje al orbe. Asimismo, la adopción de este tipo de posturas pone en juego los principios democráticos, éticos y su propia credibilidad y colocan una mordaza a la libertad de expresión», puntualizó.
Una vez más, aseguró, los grandes emisores corporativos, deciden y producen «lo que debemos saber»; orientan sus políticas hacia la manipulación, desinformación, guiones y líneas prefabricadas, basadas en cuestiones políticas e ideológicas y no en el respeto a la prensa y la veracidad de los hechos.
«RT y Sputnik transmiten sucesos corroborados en el terreno y asumen coberturas desde la responsabilidad. Asistimos a un episodio sin precedentes en la historia, donde la desesperación de las potencias de la UE, empuja al mutismo y a la contravención de instrumentos internacionales», aseguró López Tinoco.
Decisión hipócrita y peligrosa
Giorgio Trucchi, periodista italiano radicado en Centroamérica y analista político, calificó de hipócrita y muy peligrosa la decisión de la Comisión Europea y, a su juicio, ese impedimento contra las estatales rusas «se veía venir, solo buscaron la ocasión más propicia para hacer público algo que ya tenían pensado».
«Los integrantes del bloque cuando hablan de otros territorios como Venezuela, Nicaragua, Cuba o Bolivia, con políticas y gobiernos no alineados a los intereses de Estados Unidos y la UE, refieren que no existe libertad de expresión, aluden a una supuesta persecución a los periodistas y a la obstaculización constante a su trabajo ‘independiente’, como justificación de sus sanciones”, certificó.
En resumen, comentó Trucchi, exigen a otros países maneras de actuar con las cuales ellos no son consecuentes y mencionó que esa actitud de cerrar espacios comunicativos afecta en América Latina, por ejemplo, a la multiestatal de noticias Telesur en naciones dirigidas por ejecutivos de derecha.
«Cuando ganó las elecciones Mauricio Macri en Argentina lo primero que hizo fue quitar la señal de ese canal televisivo. Después del golpe de Estado contra Evo Morales en Bolivia, el gobierno de facto de Jeanine Áñez adoptó la misma disposición», enunció.
El analista italiano refirió que lo observado en estos días después del comienzo del conflicto es que las principales fake news, videos y fotos de bombardeos y personas muertas en Ucrania corresponden a otras situaciones históricas, «ninguna de esas noticias falsas corresponde a medios rusos, es la prensa occidental y estadounidense la que desinforma», concluyó.
(Tomado de Prensa Latina)
