Korda

Sin duda, su fotografía más famosa es el retrato del Che, realizada en el sepelio de las víctimas del atentado terrorista al barco La Coubre, el 5 de marzo de 1960, titulada El Guerrillero Heroico. De visita en el periódico Granma, Albero Korda contó que, entre las más de treinta diapositivas con el rostro de Che, fue esta imagen la que escogió, sin imaginar que sería una de las más reproducidas internacionalmente en la historia del lente.

Graduado de comercio en la Havana Business Academy, trabajó como visitador comercial de materiales de oficina y productos de aseo. Pero su verdadera vocación era muy diferente al trabajo que desempeñaba.

Apuntes sobre la trayectoria profesional, señalan que al despertársele la vocación comenzó a hacer fotos como autodidacta utilizando una cámara de 35 milímetros. Después recibió enseñanza de Newton Estapé y Luis Pierce (Luis Korda). Era la década de 1950 y su talento artístico lo evidenciaba con las fotos sobre la moda.

Por entonces, laboraba en una compañía de seguros, ubicada en La Habana Vieja, donde obtuvo un premio que le permitió, junto con los fotógrafos mencionados, crear allí mismo los Estudios Korda, los que luego trasladarían al Vedado, frente al hotel Capri.

Mientras que a partir de 1959 devino uno de los excelentes cronistas gráficos del proceso revolucionario de Cuba. Como fotógrafo trabajó en el periódico Revolución y de este año hasta 1969, son muchas de las fotos que le hizo al líder de la Revolución, Fidel Castro, a quien acompañó en un recorrido por la Isla y en viajes a Venezuela, Estados Unidos, Canadá, Unión Soviética, y China. Además, colaboró con los diarios El Mundo, Hoy, Granma y las revistas Bohemia, Inra, Carteles, Casa, y Revolución y Cultura.

Alberto Korda forma parte de los pioneros de la fotografía submarina de Cuba. En 1969 fue fotógrafo del Departamento de Investigaciones Submarinas de la Academia de Ciencias, lo que le permitió realizar el Atlas de los corales cubanos. En el decenio del 80 se dedicó a la foto de modas, en tanto ocupó el cargo de director de fotografía de la revista Opina e hizo trabajos para la Egrem, Cubaexport, Contex y Cubamoda. En esta época, integraba jurados de diferentes salones y concursos.

Su obra fue presentada en más de 25 exposiciones individuales y en más de 40 colectivas, llevadas a varios países de América, Europa y Asia. Sobre su vida y obra se han realizado documentales y editados libros y catálogos.

Fue uno de los fundadores de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba y recibió numerosas distinciones y condecoraciones, entre ellas: Palma de Plata. Mejor fotorreportero del Año. Periódico Revolución, 1959. Segundo Premio, otorgado tres veces con la misma categoría por la Unión de Periodistas de Cuba, respectivamente en 1970,1971 y 1975. Distinción por la Cultura Nacional. Consejo de Estado de la República de Cuba, 1982. Premio Rubén Martínez Villena. Foto-Cartel. Ministerio de Cultura, 1983. Réplica del Machete de Máximo Gómez. Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, 1993. Orden Félix Varela de Primer Grado. Consejo de Estado de la República de Cuba, 1994.

Alberto Díaz Gutiérrez, Alberto Korda, nació el 14 de septiembre en La Habana y a los 72 años falleció en Paris de un infarto cardiaco, el 25 de mayo de 2001. Fue enterrado en La Habana el 29 de mayo, en el Cementerio de Colón, en presencia de Fidel Castro, amigos y pueblo en general.

Terminamos con la selección de tres fotos que continúan impactando a los cubanos por el valor histórico y sentimental. La del Guerrillero Heroico, considerada entre las cien fotos del siglo XX más difundidas en el planeta; la niña campesina de Minas de Matahambre, Pinar del Río, abrazada al palo que imaginó su muñeca, y la miliciana que 20 años después volvió a fotografiar, cuando ella lo localizó vestida con el uniforme de las milicias.