Con la misión de encontrar los restos del poeta y periodista cubano Pablo de la Torriente Brau, las autoridades de Cataluña, iniciaron este miércoles los trabajos de apertura de una fosa común en el cementerio barcelonés de Montjuïc, en la que, según testimonios históricos, podría estar enterrado, informó la agencia Prensa Latina (PL).
Al inicio de la Guerra Civil de 1936, Pablo de la Torriente viaja a España para ejercer como corresponsal de guerra y terminó siendo parte del bando republicano como un voluntario internacional. El 19 de diciembre de ese año murió en combate en la batalla de Majadahonda, en Madrid.
De acuerdo con una nota del diario “El país”, en Cataluña, De la Torriente fue enterrado primero en el cementerio de Chamartín de la Rosa; no obstante, sus familiares deseaban trasladar el cadáver a Cuba. La única opción que tuvieron-continúa el periódico en su versión digital-fue la de embalsamar el cuerpo y trasladarlo a Barcelona con el propósito de repatriar el cadáver en un barco.
Tras la victoria del fascista Francisco Franco, el traslado del cuerpo se obstaculizó aún más y en 1939 concluyó el tiempo de ubicación temporal de los restos que permanecían en un nicho de la vía de Sant Oleguer, lo cual determinó que fueran exhumados y depositados en una fosa común junto a otras 11 personas sin identificar.
De ser ciertos los testimonios orales, entre estos el de un enterrador-precisa PL-sus restos mortales podrían ser recuperados y una vez cotejados con el ADN de sus familiares, ser trasladados a Cuba donde recibirán sepultura.
La reactivación de este proceso ha sido posible por la firma, en 2018, de un convenio entre el Gobierno catalán, el Ayuntamiento de Barcelona y el Consulado General de Cuba en esa región.
Prensa Latina destacó que la Consejería (ministerio regional) de Justicia de Cataluña, como administración competente, se encargará de las excavaciones en la fosa y de los trabajos de identificación genética, con apoyo logístico del consistorio de la llamada ciudad condal.
El cónsul general cubano en Barcelona, Alain González, resaltó en su intervención, la trayectoria revolucionaria del héroe, su lucha antifascista, su internacionalismo y la oposición asumida contra la dictadura de Gerardo Machado.
Por su parte, el concejal del Ayuntamiento de Barcelona, Marc Serra, aseguró que “hoy se inicia un acto de reparación de la memoria”, pues la exhumación “es una cuestión de justicia en un país que todavía tienen muchas víctimas en la cuneta”.
