A los desafíos de la Tarea de Ordenamiento (TO), proceso que acontece en Cuba desde el pasado 1ro de enero, estuvo dedicada la edición de este jueves de “La Tertulia”, espacio virtual de debates de la Unión de Periodistas de Cuba, conducido por el editor y analista político Iroel Sánchez.
El control y la regulación de los precios, el control administrativo y la incidencia de medidas económicas unilaterales como parte de una estrategia de guerra de cuarta generación impuestas a la Isla fueron algunas de las rutas del intercambio, que en esta ocasión tuvo como invitados a Joel Ernesto Marill, estudiante de quinto año de Economía de la Universidad de La Habana y a la economista venezolana, Pasqualina Curcio.
La eliminación de un grupo de subsidios generalizados a productos y servicios, la reforma de precios y de salarios, y la unificación monetaria han sido algunos de los elementos del ámbito de actuación de la denominada TO, que en estas dos últimas semanas ha estado en la mira de la opinión pública nacional y ha acaparado titulares dentro y fuera de la nación; y que también, como parte de un proceso de fiscalización popular y de voluntad política, no ha estado exenta de revisiones y correcciones.
La batalla de los precios
Como un proceso extremadamente complejo, por la cantidad de aristas que posee, catalogó a la TO que se lleva a cabo en la Isla, Joel Ernesto Marill. Para el joven, un punto neurálgico en el entramado de la implementación le corresponde al tópico precios que hacia el interior de la sociedad – en el bolsillo de la ciudadanía – implica una transformación del mecanismo histórico de distribución de los ingresos en la economía cubana.
Marill señaló que en este escenario de transformaciones inmediatas una de las tareas primordiales de quienes velan por la aplicación de la TO es controlar los precios especulativos: “Un precio abusivo, haciendo uso de una conceptualización sencilla, podría verse como aquel que supera de manera excesiva los márgenes de ganancia medios de la Economía. Márgenes que se fijarían por un mercado en condiciones más competitivas. Un mercado restringido por la oferta determina la capacidad de imponer precios sobre los consumidores”.
El joven apuntó que estos precios especulativos – en la realidad cubana- se dan en momentos en que escasean productos, y traen consigo el acaparamiento y la reventa, en muchas ocasiones con el contubernio de actores del sistema institucional.
Asimismo, dijo que la fiscalización de los precios por parte de la población es un mecanismo necesario para combatir los precios especulativos y la expectativa hacia la escasez; que incidan en el cumplimiento de los precios topados para que los comercializadores no se desvíen del nivel de ganancia establecido por los Gobiernos locales, en una realidad en la que se aboga por la descentralización. Esta visión – explicó – alejada de una visión liberal de la Economía y a tono con la construcción de una sociedad diferente que use el mercado, pero que no se deje gobernar por los procesos mercantiles.
Venezuela ha sido uno de los países en el cual los precios se han utilizado como ojivas nucleares económicas en el intento de desestabilización del Gobierno. Respecto a esa experiencia sufrida por el pueblo de la nación sudamericana, disertó la economista Pasqualina Curcio.
La investigadora explicó que tres años después del triunfo de la Revolución bolivariana, en el 2003, entró en vigor una política de regulación de precios para garantizar el acceso de bienes y servicios de primera necesidad a la población, pues en una economía en la que este tipo de recursos está en manos de grandes monopolios, por demás, transnacionales.
“Ese control de precios funcionó perfectamente hasta el año 2013. No hubo carencias durante esos diez años”, acentuó y explicó que tras la muerte del presidente Hugo Chávez se intensificaron las acciones imperialistas contra el Gobierno, y una de las principales acciones fue generar una escasez inducida y programada.
“De repente la harina, la pasta, la carne, el pollo, los huevos…, los medicamentos y los productos de higiene no estaban en los anaqueles. Lo otro que observamos es que esos productos sí estaban en los mercados informales que comenzaron a proliferar. Esta acción fue un arma de guerra económica en el marco de la guerra no convencional. No era un problema de producción, como decía el discurso de los medios de comunicación.
“El mecanismo de desestabilización social era que los productos no los colocaban de manera puntual y suficiente en los anaqueles, sino que los desviaban a esos mercados informales para dar una sensación de escasez – inducida y programa- y responsabilizar al Gobierno bolivariano y a la Revolución”.
Dinámicas económicas y sesgos ideológicos
¿Se construyen los procesos económicos desde pensamientos políticos hegemónicos?¿Es la Economía una ciencia desideologizada?¿Influyen la Academia y los medios de comunicación en la cimentación de paradigmas económicos?¿Los sesgos ideológicos condicionan a los procesos económicos? Algunas interrogantes que, a modo de cierre, propuso Iroel Sánchez a los invitados.
Para Joel Ernesto Marill se debe criticar la matriz de opinión que intenta implantar una visión despolitizada de la Economía, cuando “en toda ciencia hay presentes presupuestos que sesgan las construcciones científicas”. El joven subrayó que la Economía convencional ha querido hacer pasar la regulación del mercado, por ejemplo, como un mecanismo no ideológico y neutral.
“Varios medios han querido vender la idea de que los controles de precio son un sesgo político del Gobierno cubano que no permite a los productores desarrollarse y sí, existe un sesgo, pero a favor de las personas más humildes y de proteger el poder adquisitivo de las mayorías”.
En tanto, Pasqualina Curcio subrayó que la pandemia de la COVID-19 ha servido para desmoronar muchas teorías económicas como el “dejar hacer” de Adam Smith y que los mercados lo pueden todo hasta la teoría monetarista, que considera el velo del modelo neoliberal dentro del capitalismo, y parte de las armas de guerra económicas.
Próximamente Cubaperiodistas publicará la transcripción íntegra de esta edición de La Tertulia.