El Centro de Inmunoensayo (CIE), prestigiosa institución científica de Cuba, celebró este 7 de septiembre su aniversario 33 inmerso en el desarrollo de tres diagnosticadores relacionados con la COVID-19.
Los investigadores de esta entidad, perteneciente al grupo de empresas farmacéuticas y biotecnológicas de la Isla, BioCubaFarma, ya entregaron al sistema de salud el diagnosticador ELISA SARS-COV-2 IgG, que permite la identificación de anticuerpos IgG del virus en suero o plasma humano; pero se empeñan en obtener otros tres sistemas de detección.
De acuerdo con una publicación del centro en su perfil de Facebook, los científicos laboran en un ELISA para determinar anticuerpos totales, lo que aumentará la probabilidad de detectar individuos que hayan estado expuestos al virus.
Otro de los diagnosticadores en los que están enfrascados consiste en un ELISA para la identificación de anticuerpos IgM, con el cual será posible detectar a quienes hayan tenido una infección reciente por SARS-COV-2. Mientras que el tercero es un ELISA para el antígeno del SARS-COV-2, que permitirá diagnosticar personas infectadas con COVID-19.
El CIE tiene una gran experiencia en el desarrollo de estas tecnologías, lo que le brinda soberanía al sistema de salud cubano en la prevención, diagnóstico y tratamiento de distintas enfermedades.
Entre los programas beneficiados con sus contribuciones en estos 33 años se encuentran el Programa Materno Infantil, el Programa para el Control del Cáncer y el de Atención al Diabético, entre otros.
Además, han aportado equipos médicos para el servicio de cirugías, en las cuales se requieren resección y detención de sangramientos. Igualmente, espectrofotómetros, necesarios en los laboratorios clínicos, y el sistema para neurocirugía estereotáxica o de mínimo acceso.
Tomado de Cuba en Resumen
