“Ahora que estamos en el proceso de recuperación por la presencia de la pandemia de la COVID-19 en nuestro país, nos corresponde a los jóvenes asumir la tarea de promover la disciplina y persuadir a nuestros amigos y colegas de que donde menos imaginamos está el peligro de volver atrás. Por ello no podemos olvidar que este no es un verano cualquiera, que nuestra diversión debe de ajustarse a las medidas orientadas por las autoridades sanitarias en las diferentes fases der rehabilitación”,
De tal modo se expresó el joven y talentoso cantautor Jorge Ceruto Rosell, destacado trovador del Proyecto Cultural Palacio de los Torcedores y ganador de varios lauros en diferentes concursos de interpretación, quien afirmó además que una de las medidas más importantes es la de usar las mascarillas faciales y mantener la distancia, que son claves para sobrevivir a esta temporada sin enfermarnos”.
De igual forma elogió la orientación de “prohibir la entrada de trabajadores con síntomas respiratorios a los centros de trabajo y su remisión a los centros de salud con inmediatez, lo cual evitaría un posible contagio del virus, como ya ha sucedido en varios lugares de todo el país”.
Para Ceruto, la música cubana es un “paradigma internacional. Lo hemos podido comprobar durante este tiempo de cuarentena en el que infinidad de solistas, grupos y orquestas han creado piezas alusivas a esta gran campaña por la vida en la que la labor de los médicos y enfermeras ha sido uno de los temas más tratados por los compositores en todo el país”.
Este muchacho de procedencia humilde, posee una natural afinación y colorido en su voz que atrae la atención del público que le profesa palmas. Estudioso a diario de la guitarra, su instrumento querido y con el que, aunque ha trascendido más como trovador, es capaz de interpretar los más variados géneros, como el son, la guaracha, el bolero y la canción —incluyendo la destinada a la infancfia—, admira el legado del Movimiento de la Nueva Trova, y en especial de Silvio Rodríguez y Pablo Milanés, entre otros grandes, de los que ha incluido temas en su repertorio.
El joven trovador de 18 años de edad, con una sorprendente formación autodidacta, ha participado en diferentes programas de la televisión nacional, así como en espectáculos de primer nivel, como la gala en homenaje a los aniversarios de José martí y de la CTC, efectuada el pasado 28 de enero en el Palacio de los Torcedores, en Centro Habana, donde actuó junto con figuras de la talla de Arnaldo Rodríguez y su Talismán, Yaíma Sáez, Bernardo LichilÍn, la orquesta de Pancho El Bravo y el Coro Folclórico Nacional, estos dos últimos Patrimonio Musical de Cuba, además de la Orquesta Juvenil de Guitarras, entre otros.
De complexión atlética, alto, mestizo, amable y muy disciplinado, este cantautor nacido en el capitalino municipio del Cerro habla con orgullo de su madre y de sus abuelos, luchadores revolucionarios que forjaron en él elementales principios de disciplina social y sobre todo de educación y cultura. “Mi abuelo es un escritor y poeta que aunque su obra no se conoce públicamente, te puedo asegurar que posee una consistencia lírica y temática que impresiona; mientras que mi madre es mi principal promotora, a quien le debo mucho tiempo de dedicación y amor en mi formación artística”.
Al referirse al periodo de cuarentena en el hogar apunto: “En mi casa ha sido, y es, obligatoria la desinfección de las manos con hipoclorito de sodio o alcohol, así como el lavado con agua y jabón. Cada vez que alguien nos visita debe seguir este riguroso proceder que asimismo toda la familia observa cuando alguien regresa de la calle”.
También se refirió a la posibilidad de ir a la playa “esa es una tradicional opción de los cubanos durante el verano, pero tenemos que tener en cuenta que no se pueden formar grupos de personas. En esa rigurosa orientación contaremos con el apoyo de la Policía Nacional Revolucionaria, la cual ha desempeñado un papel muy importante en la lucha por salvaguardar la vida”.
Al referirse a la reanimación cultural del país, habló con entusiasmo a la reapertura “de las casas de cultura, teatros y cines, manteniendo las medidas de distanciamiento físico de al menos un metro entre las personas, o una densidad humana máxima de una persona por cada dos sillas, como se ha orientado por el Ministerio de Cultura”.
Ceruto se encuentra en estos momentos inmerso en la formación del grupo musical del Proyecto Cultural Palacio de los Torcedores, el cual dirigirá y estará principalmente integrado por jóvenes como él especializados en piano, guitarra eléctrica, batería y percusión. “Queremos crear un gran repertorio de música cubana, de todos los géneros, incluidos los temas épicos y patrióticos, estoy seguro que va a ser un grupo que ganará espacio dentro del pentagrama nacional. Para ello nos entregaremos con amor, interés y profesionalidad”.