La Organización Mundial de la Salud (OMS) registró este domingo 183 mil 20 nuevos casos, siendo este el peor día desde que inició la pandemia. Esta cifra supera el récord anterior de 181 mil 232 infecciones contabilizadas el 18 de junio, de acuerdo al reporte diario sobre la situación de la COVID-19 emitido por la institución.
Los países más afectados durante la última jornada fueron Brasil, con 54 mil 771 nuevos contagios y Estados Unidos, que registró 36 mil 617. Mientras, el nuevo coronavirus continúa propagándose por América Latina y se incrementa el rebrote en China.
Según un recuento de la AFP, en la última jornada las cifras globales ascendieron por encima del medio millón de fallecidos y los diez millones de contagios. A partir de fuentes oficiales, la agencia calculó totales de 500 mil 390 muertes y 10 millones 99 mil 576 casos.
Si tenemos en cuenta que el pasado 5 de mayo el mundo solo había reportado 250 mil decesos, el número de fallecidos se ha duplicado en menos de dos meses. Solo en los últimos diez días se registraron 50 mil muertes, un incremento considerable en coherencia con la aceleración de los contagios.
Actualmente, Europa es el continente con más muertos (196 mil 86), seguido por Estados Unidos y Canadá (134 mil 315) y América Latina y el Caribe (111 mil 640).
Estados Unidos se mantiene como el país más afectado con alrededor de 2 millones y medio de contagios y más de 125 mil muertes. Según los analistas, aunque la cifra de fallecimientos diarios ha disminuido ligeramente en junio con relación a mayo, los contagios han aumentado en 30 de los 50 estados del país, sobre todo en los más grandes y poblados del sur y el oeste: California, Texas y Florida.
Esto podría estar relacionado con la flexibilización del aislamiento social en varias zonas, puesto que la edad promedio de los infectados ha disminuido en torno a los 33 años, frente a los 65 de hace dos meses. En Los Ángeles y otros seis condados de California, las autoridades volvieron a ordenar el cierre de bares.
Según Rob DeSantis, gobernador de la Florida, el estado se enfrenta a una «explosión real» de la enfermedad entre los jóvenes que, gracias al desconfinamiento desde principios de junio, han regresado a las playas y la vida nocturna.
En América Latina y el Caribe, el virus sigue avanzando sin frenos aparente. En Brasil, país más afectado de la región, el Ministerio de Salud informó que la pasada semana fue la peor desde que la llegada de la pandemia, al sumar 259 mil 105 infecciones. Las muertes, mientras, superaron las 7 mil.
Sin embargo, el presidente del gigante sudamericano, Jair Bolsonaro, sigue apostando por una política de negación que privilegia a la economía. Este domingo hubo manifestaciones en varias ciudades del país y otras como Estocolmo, Londres y Barcelona, contra su manejo de la crisis sanitaria.
Del otro lado del mundo, China ha confinado a medio millón de personas cerca de la capital Pekín, que ha sido golpeada por un rebrote de la COVID-19. Las autoridades lo describen como “grave y complejo”.
Mientras, Europa parece haber controlado la propagación, pero la OMS advirtió el jueves del aumento de casos, que podría llevar «al límite de nuevo a los sistemas sanitarios».
(Tomado de Cuba en Resumen)
