Cuba no desmaya en entregar su solidaridad al mundo en tiempos de pandemia y en las últimas horas salió hacia la República Togolesa, en el Africa Subsahariana, una brigada de once colaboradores cubanos de la salud integrantes del Contingente Internacional Henry Reeve.
La delegación, que este lunes debe estar ya en Togo, está dirigida por el doctor Miguel Gómez Cruz, procedente de la provincia de Pinar del Río, la más occidental de Cuba. La integran enfermeros, clínicos, epidemiólogos y especialistas en medicina general integral.
Es la primera vez que un contigente médico cubano laborará en la República Togolesa, aunque centenares de trabajadores cubanos de la Salud prestan servicios desde hace años en varias naciones de ese continente, entre ellos Angola y Sudáfrica.
Este es el décimo octavo contingente médico cubano que ha salido en las últimas semanas a combatir la COVID-19, en países de América Latina, el Caribe, Africa y Europa.
Este domingo la Asociación de Amistad Italia-Cuba saludó el próximo arribo de una segunda brigada de colaboradores cubanos de la Salud, la cual reforzará el trabajo que desde hace más de tres semanas realizan otros 52 colaboradores cubanos en la región de Lombardía, la más golpeada por la emidemia.
El comunicado de la Asociación de Amistad Italia-Cuba agradece al gobierno y pueblo cubanos por este gran gesto de solidaridad, humanidad y altruísmo ante una dramática emergencia sanitaria mundial, que golpea también a la pequeña y bloqueada Cuba.
El Contingente Internacional Henry Reeve fue creado hace 15 años como un gesto solidario de Cuba con la población estadounidense que fue azotada por el huracán Katrina, pero la cooperación no fue aceptada por el gobierno de George W. Bush. Sin embargo, a partir de entonces decenas de países de todos los continentes las han recibido y elogiado, así como también la Organizacíón Mundial de la Salud.
En las últimas seis décadas aproximadamente 400 mil trabajadores cubanos de la Salud han prestado servicios en 164 países de todos los continentes. Y de la Escuela Latinoamericana de Medicina, creada por Fidel Castro en 1999, han egresado más de 29 mil 600 galenos procedentes de 103 naciones, entre ellas de los Estados Unidos. Muchos de estos jóvenes médicos graduados en Cuba son los que en estos momentos combaten la pandemia en sus países.
