De desafíos éticos, jurídicos y culturales en el ciberespacio se dialogó en el panel con juristas que sobre estos temas aconteció este 26 de junio, en la segunda jornada del I Foro Nacional de Gobernanza de Internet que sesiona en Palacio de Convenciones y concluye este jueves.
El principal valor que debe tener la gobernanza en el universo digital desde la perspectiva cubana — concordaron los panelistas — es la primacía del respeto pleno a la dignidad humana.
La ética, compartió Yarina Amoroso, presidenta de la Sociedad Cubana de Derecho e Informática de la Unión de Juristas de Cuba, es un elemento transversalizador en este escenario ya no tan nuevo. Asimismo, expuso que su presencia en el entorno ayudará a incidir de manera positiva en el establecimiento y cumplimiento de normas consensuadas.
No se trata, apuntó, solo de implementar mecanismos sancionadores, sino de fomentar valores en la ciudadanía desde una dimensión social del derecho, enfocada a promover actitudes cívicas y que se eviten conductas denigrantes de usuarios que vulneren el derecho de otras personas, a través de hechos como el uso de la imagen o de sus datos personales.
Alexis Ginarte, presidente de la Unión Nacional de Juristas de Cuba, explicó que el derecho penal no va a poder regular todas las infracciones que se cometan en el entorno digital, aunque haya figuras tipificadas en la ley actual de procedimientos penales.
En ese sentido, los expertos del panel concordaron en la necesidad de crear cultura sobre la base del respeto a lo legislado en el país en dicho ámbito y en construir instrumentos legales que respalden las disposiciones jurídicas sobre el tópico presentes en la recién aprobada Carta Magna cubana.
En marcha la Informatización de la sociedad cubana
Durante la sesión del evento Ernesto Rodríguez, viceministro de Comunicación de la Isla, ofreció una actualización de la marcha del proceso de informatización del país.
Cuba tiene más de dos millones 400 mil personas con acceso a Internet desde los celulares, más de 80 mil hogares conectados, mil 300 zonas de navegación por wifi y unas 670 salas colectivas.
Aseguró que es irreversible la ampliación de la infraestructura para la conectividad, con mayor calidad del servicio y un mejoramiento progresivo del acceso mediante el abaratamiento de las tarifas.
Aunque, aseguró, todavía la plataforma de servicios y contenidos nacionales está lejos de lo deseado, ni tampoco se ha avanzado lo suficiente en materia de comercio electrónico y economía digital.
“No solo es un problema tecnológico, sino cultural”, añadió el viceministro, quien explicó que existen más de cinco millones de tarjetas magnéticas en uso, pero el 93% del total de operaciones todavía son de extracción de efectivo en los cajeros automáticos.
Compartió que referente al gobierno electrónico se ha avanzado en el desarrollo de herramientas de monitoreo que miden el posicionamiento de los sitios cubanos, su accesibilidad y niveles de respuesta.
Dijo que en la actualidad todos los Organismos de la Administración Central del Estado y los gobiernos territoriales cuentan con portales digitales institucionales para facilitar la atención a la ciudadanía.
“El ciudadano es el centro de este proceso. Debemos tener en cuenta que no se pueden informatizar los procedimientos obsoletos y que se requiere una reingeniería enfocada a elevar su calidad”, resaltó.
Asimismo, el viceministro señaló que avanzar en la informatización de la nación implica hacerlo también en las garantías de ciberseguridad y crecer así en niveles de soberanía e independencia digital.
Rodríguez subrayó la importancia de ganar cultura en el uso de Internet como una herramienta al servicio del desarrollo humano sostenible, de la identidad, la cultura nacional y la promoción de sus valores. Igualmente, destacó su implicación en el fomento y desarrollo de redes de conocimientos y como espacio para la comunicación social, la cooperación, la asociación y el intercambio de información con los ciudadanos.
El evento, con el lema “Internet: Justicia Social y el Desarrollo Humano Sostenible”, es auspiciado por la Asociación Cubana de las Naciones Unidas (ACNU), la Unión de Informáticos de Cuba (UIC), Unión de Periodistas de Cuba, Asociación Cubana de Comunicadores Sociales, Unión de Juristas de Cuba, Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba y la Asociación de Pedagogos de Cuba.