La muerte del periodista y luchador congolés Dihur Godefroid Tchamlesso impactó este viernes a cubanos de varias generaciones que lo conocieron, tanto en combate junto al Comandante Ernesto Che Guevara en el Congo, como en el frente diplomático y periodístico.
Con una alta formación académica, Tchamlesso era fluido en idiomas, desde el swahili hasta el español, pasando por el inglés y el francés, y una de sus funciones en la guerrilla del Congo de 1965 fue ser el traductor del Che.
En sus últimos días y desde un hospital de España, Tchamlesso le dijo al diplomático cubano Héctor Igarza: “siempre he sido fuerte ante la muerte. Pero ya ahora no hay nada que hacer sino enfrentarse a ella con dignidad, como siempre hice todo en mi vida”.
Según dijo Igarza a Prensa Latina, Tchamlesso agregó: “sólo quiero que mis restos se trasladen para Cuba, mi segunda patria”.
En Cuba, donde había estudiado, trabajado, formado familia y establecido duraderas amistades, fue reconocido con la Medalla de la Solidaridad, otorgada por el Consejo de Estado.
Al momento de su fallecimiento tras una prolongada y penosa enfermedad, a los 77 años de edad, Tchamlesso era embajador itinerante de la República Democrática del Congo. Antes, había sido embajador en Angola y ministro de Seguridad y Defensa de su país. Siempre estuvo vinculado a sus compañeros de la tropa internacionalista del Che. Tras el retorno de esos combatientes a Cuba, Tchamlesso estudió periodismo en la Universidad de La Habana, donde demostró gran capacidad para adaptarse a otras culturas, costumbres y lenguas.
Durante más de 15 años trabajó en la agencia informativa Prensa Latina, donde fue redactor en las áreas de Norteamérica y el Caribe y, más adelante, enviado especial a Estados Unidos y corresponsal en Haití, Jamaica y Guyana, con amplio destaque en importantes coberturas internacionales.
También trabajó en el periódico Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba.
En las últimas semanas tuvo estrecha comunicación con Prensa Latina, que lo había invitado a asistir a un próximo Encuentro de Periodismo Internacional con motivo del 60 aniversario de la Operación Verdad, reunión que derivó en la fundación de esta agencia informativa latinoamericana.
Al respecto, escribió: “si mi salud mejora, ténganlo por seguro que intentaré acudir personalmente a la cita histórica de nuestra Agencia. Es mi deber y obligación estar junto a ustedes en la conmemoración del 60 aniversario del lanzamiento de la Operación Verdad”. Seguimos firmes y fieles, agregó, a los legados de los grandes próceres y libertadores de América Latina y de África en la Trinchera de las Ideas.
Prensa Latina
Impactada por la noticia de la muerte de Tchamlesso, a quien conocí en el año 71 como estudiante de periodismo ambos, -él dos cursos anteriores a mi grupo-, y de quien me precio ser amiga, preciso solidarizarme con su familia, colegas y amigos, que somos muchos en muchos lugares. Su modestia, su sencillez, su manera suave y firme de brindar ayuda, lo hacía un gentleman negro, un cortés admirador de la mujer cubana, una persona de principios firmes no negociables… Hace apenas una semana creí verlo, y tuve que acercarme a la persona para cerciorarme de mi error. Ahora pienso si a lo mejor se estaba despidiendo desde la lejanía. Descansa en paz, enorme amigo, mi corazón te llora.