El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, intercambió en las primeras horas de este martes, a través de una videoconferencia, con autoridades del Gobierno y del Partido de las provincias centrales, sensiblemente afectadas por las intensas lluvias e inundaciones provocadas por la tormenta subtropical Alberto.
En el encuentro participaron varios ministros que ofrecieron informaciones preliminares sobre los daños ocasionados, los cuales no podrán precisarse con total exactitud hasta tanto desciendan los niveles de agua.
El titular de Energía y Minas, Alfredo López Valdés, notificó que alrededor de 58 000 consumidores estaban en ese momento sin servicio eléctrico, para lo cual 60 carros con la dotación correspondiente trabajaban desde la madrugada y otro grupo está listo para restablecer la energía eléctrica en cuanto se pueda acceder a los lugares incomunicados. Según aseveró, se cuentan con todos los recursos materiales y humanos para ello.
Sobre la distribución de la canasta básica, la ministra de Comercio Interior, Mary Blanca Ortega Barredo, aseguró que se han estado entregando los productos normados, comenzando por los municipios más intrincados, y se indicó adelantar su venta a la población. Igualmente se contabilizan algunos daños en la infraestructura de bodegas, cafeterías y otros locales del comercio.
Las afectaciones en la agricultura se concentran en productos como plátano, frijoles, arroz, tabaco, hortalizas, así como en algunos sistemas de riego y en el acopio de leche, que se mantiene interrumpido ante las inclemencias del tiempo. Al respecto, el viceministro primero de la Agricultura, Julio García Pérez, aseguró que se recoge todo lo que está en tiempo de cosecha y se mantiene bajo vigilancia el arroz maduro en los campos. Precisó que existen semillas y fertilizantes suficientes para empezar la recuperación.
Sobre los perjuicios en los viales de la zona central informó René Mesa Villafaña, ministro de la Construcción, quien confirmó que varios puentes y carreteras han sufrido daños por las inundaciones y las crecidas de los ríos, para lo cual se alistaron equipos de ingenieros y arquitectos que trabajan, de conjunto con el Ministerio del Transporte, en el cálculo de los afectaciones de las estructuras y en las medidas a adoptar, tanto en el corto como en el largo plazo.
Acotó Adel Yzquierdo Rodríguez, ministro del Transporte, que en las afectaciones se incluyeron, además del cierre temporal de la autopista nacional, la obstaculización de varios puntos del ferrocarril central a causa de las inundaciones, así como la suspensión de las salidas programadas por la Empresa Ómnibus Nacionales que en su itinerario tenían previsto circular por Cienfuegos, Villa Clara y Sancti Spíritus.
Por su parte, la presidenta del Instituto de Recursos Hidráulicos (inrh), Inés María Chapman Waugh, actualizó acerca de la situación de los embalses del país, 141 de los cuales están por encima del 90% de llenado y todos los de la región central vierten. Alertó que, aun cuando vayan disminuyendo las lluvias, se esperan importantes escurrimientos desde las montañas, por lo cual debe mantenerse la vigilancia hidrológica. De manera particular, advirtió sobre el período lluvioso que recién comienza con casi todas las presas llenas, reto para el cual hay que prepararse bien. Enfatizó en la necesidad de clorar toda el agua que está consumiendo la población de esos territorios para no afectar la salud.
La vitalidad del sistema de salud fue confirmada por el ministro del sector, Roberto Morales Ojeda, quien comentó que, a pesar de afectaciones puntuales, se ha mantenido el servicio en dichas provincias. De manera particular, mencionó la situación con el hospital 9 de Abril, de Sagua la Grande, severamente dañado, donde se ha tenido que reorganizar la atención.
Alertó sobre las medidas de control epidemiológico que deben reforzarse para mantener la estabilidad sanitaria que ha podido lograrse en el país hasta la fecha.
La titular de Educación, Ena Elsa Velázquez Cobiella, detalló la situación del sistema escolar, donde alrededor de 50 centros han sufrido afectaciones y en otros 54 se mantienen personas evacuadas. En las cinco provincias centrales se detuvo el curso lectivo, pero se trabaja rápidamente para retomarlo en el menor tiempo posible con varias alternativas.
Por su parte, las fuerzas del Ministerio del Interior están movilizadas en los territorios afectados y su trabajo se ha dirigido, sobre todo, a regular el tránsito en las vías dañadas y proteger las pertenencias de las personas evacuadas. Su titular, el vicealmirante Julio César Gandarilla Bermejo, precisó que se actúa sobre las indisciplinas cometidas, fundamentalmente por la baja percepción de riesgo de algunas personas.
En tanto, las Fuerzas Armadas Revolucionarias, como es habitual, se han sumado a la evacuación de quienes han quedado aislados en determinadas zonas.
Mediante la videoconferencia se recibió de primera mano información detallada y actualizada de cada uno de los territorios, algunos de los cuales aún permanecen bajo los efectos de las lluvias.
Entre otros aspectos se supo, por ejemplo, que en la provincia de Matanzas las presas estaban al 70 % de llenado; se evacuaron más de 6 000 personas y preliminarmente existen daños en 54 viviendas y en alrededor de 1 700 hectáreas de cultivos.
Desde la provincia de Cienfuegos, que se encuentra en fase de alarma, se catalogó como compleja la situación de las lluvias, con 22 zonas inundadas y 19 localidades incomunicadas. Allí también se tomaron todas las medidas para proteger a la población.
De Villa Clara se conoció que sus embalses estaban por encima del 99 % de llenado; 35 comunidades se encontraban aisladas; se habían protegido a más de 21 000 personas; y la mayor atención estaba puesta entonces en la comunidad de El Santo, en Encrucijada, por el peligro de inundaciones.
En Sancti Spíritus existía también un tenso escenario, con nueve presas aliviando y un monitoreo constante de la Zaza, que llegó a acumular 1 174 millones de metros cúbicos, nivel que había bajado en las últimas horas. En el territorio se evacuaron alrededor de 15 000 personas y se mantenían incomunicadas 78 comunidades.
De Ciego de Ávila se informó que las mayores afectaciones están en las localidades de Majagua, Florencia, Chambas y Morón. Todos los embalses de la provincia se encontraban vertiendo y alrededor de 500 personas fueron evacuadas. La situación en el territorio avileño se complejizó aún más con la ocurrencia de tornados, que causaron daños en varias viviendas.
Ante este panorama, el Presidente cubano indicó que cuando comience a mejorar el clima hay que centrarse en la recuperación de daños, en primer orden reestableciendo servicios básicos como el agua, la electricidad, la transportación y la venta de alimentos.
Tenemos que hacer una adecuada valoración de las afectaciones y retomar las experiencias de trabajo puestas en práctica con el huracán Irma, como es el caso de las brigadas mixtas y la centralización de trámites en un solo lugar para que la población pueda agilizar la recuperación de sus viviendas, comentó.
Díaz-Canel precisó además que debe asegurarse el regreso de los evacuados a sus lugares de origen, siempre que sea posible, o de lo contrario buscar otras alternativas para no mantener las escuelas ocupadas y que el curso pueda reiniciar en menor tiempo.
Enfatizó que se deben enfrentar resueltamente los hechos vandálicos que pudieran producirse en esta situación de alta sensibilidad y ejemplificó con el combate a los especuladores que aprovechan estos momentos para subir los precios a la población.
Según precisó, el Ministerio de Economía y Planificación trabaja en la evaluación de los recursos necesarios para enfrentar la recuperación y que estos sean llevados a los territorios en el menor tiempo posible.
Dio a conocer que en las próximas horas partirán tres grupos de trabajo hacia las provincias afectadas, dirigidos por el primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Salvador Valdés Mesa; el segundo secretario del Partido Comunista de Cuba, José Ramón Machado Ventura; y el Comandante de la Revolución, Ramiro Valdés Menéndez. Los dos primeros grupos estarán en la región central del país y el tercero en la occidental.
El Presidente cubano aseguró que, como en otras ocasiones, el país saldrá victorioso de esta difícil situación, que prueba de nuevo la capacidad de reacción y respuesta de los cubanos ante eventos extremos de este tipo que, producto del cambio climático, son cada vez más frecuentes e intensos.