Una nueva especie de palmera fue descrita en la provincia de Sancti Spíritus por cuatro investigadores de la Sociedad Cubana de Botánica, quienes efectuaron el análisis científico para su validación.
Denominada popularmente palma azul, fue descubierta en 1995 por especialistas del Jardín Botánico espirituano; sin embargo, no fue hasta la actualidad que se reunió un equipo de expertos para hacer el estudio, el cual determinó que, efectivamente, constituye una especie nueva.
Los investigadores, incluidos especialistas de los jardines botánicos de Cupaynicú, de Granma, y de Sancti Spíritus, describieron y validaron la especie, localizada cerca de San Felipe, poblado ubicado en una zona limítrofe entre el municipio espirituano de Jatibonico y Florencia, en Ciego de Ávila.
Según informó a la ACN Celio Moya López, uno de los botánicos autores del descubrimiento, la planta se presenta únicamente en la zona colinosa con sustratos de roca serpentina, lugar donde predominan matorrales espinosos denominados comúnmente cuabales.
El especialista dijo además que la planta crece silvestre en ambas localidades cubanas (la espirituana y la avileña); y que su nombre científico es Coccothrinax spirituana, en alusión a la provincia de Sancti Spíritus.
La denominación popular hace referencia al llamativo color ceniciento azuloso que tienen sus hojas, una de las diferencias más visibles de esta palma con respecto a otras, detalló.
Relacionada con la especie Coccothrinax macroglossa, diverge con ésta, además del color, por su menor estatura, mayor largo y menor cantidad de segmentos de las hojas, apuntó.
Asimismo, señaló que en el caso de la “azul”, ésta es una palma pequeña de tres a cinco metros, inerme, solitaria, de tallo erecto de 12 a 15 centímetros de diámetro, normalmente cubierto con una red fibrosa de las vainas de las hojas.
Julio Pavel García Lahera, otro de los especialistas que intervinieron en el estudio, comentó que posee amenaza de extinción y pese a que su población es numerosa, su área de ocupación es muy pequeña, de unos 25 kilómetros cuadrados.
El Máster en Botánica puntualizó que la especie se encuentra presionada por la pérdida y degradación de su hábitat, además de que la zona está siendo reforestada con especies exóticas.
Los otros investigadores autores de la descripción y validación son Raúl Verdecia, del Jardín Botánico de Cupaynicú, de Granma, y Lester Martínez, de la Sociedad Botánica de Sancti Spíritus.
El estudio fue publicado por Palms, revista científica de la International Palm Society de Estados Unidos, la cual da a conocer resultados relevantes mundiales referidos específicamente a la familia botánica de las palmas.
Los ejemplares tipo de la palma azul se encuentran depositados en el Herbario Maximiliano Curbelo, del Jardín Botánico de Las Tunas, y en el Herbario Nacional de Cuba, del Instituto de Ecología y Sistemática de La Habana.
Tania Rendón Portelles / Agencia Cubana de Noticias