“La Habana es ahora y será, sin lugar a dudas, más bella. Vengan ciclones, vientos, proscripciones, encierros, siempre seremos capaces de salir, romper el muro y seguir adelante”, dijo este martes el Historiador de la Ciudad, Doctor Eusebio Leal Spengler, a la sombra de El Templete, mientras la lluvia bendecía a la Villa de San Cristóbal, víspera de su cumpleaños 498, el venidero 16 de noviembre.
Leal celebró el advenimiento del nuevo aniversario y también el renacer de la urbe, pues anunció a la prensa nacional y extranjera que la Oficina del Historiador de la Ciudad lidera “un movimiento perpetuo de acciones y obras” con vistas a los 500 años de La Habana, en 2019, para que el festejo sorprenda a la otrora Villa con una fisonomía luminosa, fiel a su pasado, rescatada de los estragos del tiempo.
Habló sobre uno de los regalos que trae esta conmemoración, la restauración de El Templete, “el pequeño templo grecorromano, que fue tocado por última vez en el año 1928, exactamente en una conmemoración redonda de la fecha que fue inaugurado, el 25 de marzo de 1828, como reza en la lápida que está sobre su dintel”.
Allí, de pie, al frente de la columna Cagigal, “el padrón más antiguo que fue colocado en este sitio junto a un árbol de ceiba, que según la tradición dio sombra a la celebración del primer Cabildo, la institución jurídica de Castilla en América“, rememoró aquel campamento que sería la Villa de San Cristóbal de La Habana y, luego, la capital de la Isla de Cuba.
Aclaró que “cuando hablamos de la fundación de la ciudad nos referimos a su asiento definitivo, en el lugar que hoy ocupa y junto al puerto de su mismo nombre ― el que Sebastián de Ocampo llamó De Carenas en 1508―”.
VIGILIA Y LABORIOSO AJETREO
Mañana, anticipó, durante la vigilia que tendrá lugar a las 10:00 p.m., antes del anochecer, “saldremos del Palacio con las Actas Capitulares, fundidas en el año 1632 por el Maestro orfebre habanero Juan Díaz. Se escuchará el doblar de las campanas del Castillo de la Real Fuerza, de las iglesias y campanarios antiguos de la ciudad celebrando el acontecimiento del día siguiente, el 16 de noviembre, festividad para La Habana de San Cristóbal, su patrono”.
En la Plaza de Armas se vive un ajetreo laborioso. El cielo está encapotado pero los maestros, como les llama Eusebio, reparan, pintan, colocan detalles que son patrimonio y reliquias, alistan La Habana para la celebración del jueves.
“La lluvia ha sido pertinaz en estos días, no ha detenido los trabajos de ninguna manera, a los cuales se han sumado las familias, los vecinos, y creo que ha convenido, porque fue necesario plantar dos veces el árbol de ceiba, ya que las más antiguas, por la proximidad de un manto freático salino, mueren cuando la raíz caudal tocan la sal, el árbol muere.
“Por eso, sucesivas generaciones plantaron sucesivos árboles, el nuestro que aparece ahí es el del 500 aniversario y ha de dar sombra a los vecinos, al pueblo, a las autoridades, a la nación, en los próximos años”, resumió el Doctor Eusebio Leal.
Destacó que cuando se conmemore el aniversario 500, La Habana será, como otras ciudades patrimoniales de Cuba o la isla de la Española (Haití y República Dominicana), una de las ciudades y capitales más antiguas del continente americano. “Está entre las primeras”, apunta.
“La Habana tuvo un papel preponderante en la historia de la navegación, en la historia de la cultura, en la historia de gran disputa producida en el Caribe por el repartimiento del mundo, el que hoy La Habana indemne saluda, desde aquí, desde El Templete”, dice con orgullo el Historiador.
Así la Oficina del Historiador, junto a otras instituciones afines, ha iniciado los trabajos por rescatar los restos arqueológicos de las edificaciones y símbolos que atestiguan la fundación de la Villa, y que conformarán un parque arqueológico que ha de estar listo para el aniversario 500, el 16 de noviembre de 2019.
De momento, ya también se ha recuperado “el Pórtico perdido de 1852”, demolido en 1929-1930 para hacer la ampliación de la Avenida del Puerto. La Puerta de la Calle O’Reilly “con el escudo original de la siempre fidelísima Habana y sus cañones gastados en la defensa de la Villa, que están colocados ya, y en este momento terminan los maestros de colocar las lanzas sobre las rejas”, describió Eusebio.
Al mismo tiempo enumeró otras “obras muy importantes que también quedan inauguradas, como por ejemplo, el Centro Juvenil en el corazón de La Habana Vieja, dotado de todos los elementos modernos para que la juventud habanera y cubana pueda disfrutar del arte de hacer cine, radio, de estudiar danza, de disfrutar de su biblioteca, en medio de un conjunto de viviendas, museos, que resumen el ideal de la Oficina del Historiador”.
En el Castillo de la Real Fuerza, se podrá descubrir una colección aún más completa de los tesoros del rescate submarino que a lo largo de los años el país salvó. “Podrá inaugurarse también el nuevo Museo de Arqueología, en el Palacio de Tacón 4, que fue la Obra Pía del famoso obispo habanero Peñalver, y al mismo tiempo fue la casa de los Pimientas, la familia portuguesa armadora y constructora de naves”, contó Eusebio.
Reabrirán las puertas del Palacio de los Capitanes Generales, con la casi totalidad de sus salas completamente restauradas. La entidad que ama y construye La Habana Vieja estrena el Centro de Información de la Oficina del Historiador y, en otra esquina de O’ Reilly, el nuevo local de su Agencia San Cristóbal, “instrumento que une a las ciudades patrimoniales de Cuba, gestiona un turismo culto y atraído por las ciudades históricas, por la arqueología, por los eventos y congresos que tienen que ver con el Patrimonio cultural”, explicó.
La Habana patrimonial no escapó al embate de Irma, sin embargo algunos de sus estragos ya han quedado atrás. Leal lo corroboró esta mañana: “Se reabre el Parque Infantil después de los daños causados por el ciclón, se restituye el monumento de Luz y Caballero, que fue afectado también, con todos sus jardines”, aseguró.
Asimismo informó que el próximo 7 de diciembre se habrán terminado también los jardines y la adecuación del Parque-Monumento al Mayor General Antonio Maceo, en el Malecón.
Leal disfrutó con cada palabra poder comunicar tan buenas noticias e insistió en adelantar otras novedades del intenso programa que comienza este año: “Se harán emisiones postales, se acuñarán medallas, se restaurarán edificios, se llevarán monumentos dañados a lugares más propios ya que el malecón ha sufrido un embate brutal. Y no se asombren de que tengamos que demoler algunos edificios por los cuales luchamos rabiosamente durante años.
“Para el próximo año estamos restaurando el Colegio de Martí, en el Prado, la escuela San Pablo de Rafael María de Mendive, todo un monumento a la ética y a la cultura cubana. Trasladaremos el monumento al Mayor General Calixto García a un nuevo emplazamiento y allí quedará como un símbolo, sobre un montículo, la Estrella de Cuba y la Bandera de Cuba, que resistió los embates del ciclón”, afirmó.
La Habana cumplirá el jueves 498 años y allí iremos sus fieles a rendirle tributo, al pie de una ceiba joven, como lo es su espíritu y el de quienes la salvaguardan. Porque como dijo hoy su “Leal historiador”:
“La Habana es ahora y será, sin lugar a dudas, más bella. Vengan ciclones, vientos, proscripciones, encierros, siempre seremos capaces de salir, romper el muro y seguir adelante. Esa es la historia del árbol y es la historia de nosotros. Es como el árbol de la vida, a su sombra nos refugiamos”.
Dianet Doimeadios Guerrero / Cubadebate