Hace varios años que se habla de ello en Holguín. Comenzó como una simple calentura, que no atacada a tiempo se transformó en fiebre y actualmente amenaza con ser un mal duradero. Gran parte del Consejo Popular de Aguas Claras parece queso suizo, lleno de agujeros profundos y oscuros.
Hay remoción de la tierra, aumento de la inestabilidad de las laderas, cauces y peligro de deslizamientos que pueden convertirse de un momento a otro en un problema social porque cientos de hombres y mujeres ejecutan la extracción ilegal de oro en las viejas y desgastadas minas de la zona.
Son como “topos alocados”, dedicados a cavar y cavar sin control; ya encontraron las galerías antiguas de la mina y algunos, que no saben nada de minería, se dedican a sacar las vigas de sostén, de madera preciosa como jiquí y ácana, para comercializarlas fuera, sin comprender cuánto debilitan la galería y que pueden quedar atrapados en un foso profundo por su propia irresponsabilidad.
Existe modificación severa del suelo, inversión de su prisma y otras agresiones ambientales, que hacen muy negativa la huella ecológica en esa zona e incluso compromete lo que de la tierra, agua, suelo, aire y foresta les pertenece a las próximas generaciones.
Hay afectaciones en el río Tranquera, riachuelos próximos y en aguas subterráneas, han deforestado la franja hidrorreguladora y utilizan sustancias prohibidas como mercurio y el cianuro de sodio para recoger el oro. Existe pérdida de la diversidad biológica y lo más preocupante: agresión a la salud humana por el riesgo de incorporar al organismo metales pesados y a la atmósfera gases contaminantes.
Acerca de este problema, Alejandro Martín Moro, vicepresidente del Consejo de Administración municipal, asevera: “Desde el 2011, o quizás un poco antes, se detectó la extracción ilegal de oro en Aguas Claras y se han adoptado diversas medidas para atenuar o eliminar la situación, la mayoría de ellas de carácter educativo.
“Actualmente, tienen responsabilidad en el área diversos organismos, entre ellos, la Granja Pecuaria, la CPA René Ávila Reyes, y la Agricultura, porque hay tierra entregada por el Decreto-Ley 259, y la Empresa Forestal Holguín”.
Se han aplicado multas, pero realmente irrisorias respecto a la magnitud del impacto negativo en el ambiente que genera esa ilegalidad. En operativo conjunto con el CITMA, se decomisaron algunos instrumentos porque los ilegales tienen de todo: picos, palas, bombas de agua, mangueras, jibes, carretillas y hasta productos químicos. ¿De dónde salen el mercurio o el cianuro? Es una respuesta que quisiéramos saber.
Hay evidencias de que algunas de estas personas son asalariadas pues expresan que “alguien” les paga 40 ó 50 pesos diarios por excavar como topos, otros se llevan la tierra para lavarla y realizar el proceso, mientras que “los más inteligentes y adinerados” obtienen la verdadera ganancia, pues pagan 80 pesos o 3 CUC por un gramo de oro, cuando su precio real supera los 35 dólares.
Se ha verificado la presencia de menores de edad en estos asuntos y durante el día ha disminuido la extracción porque utilizan los horarios nocturnos. No obstante, en nuestra visita pudimos constatar como ante el ruido del carro y la presencia de reportera y fotógrafo, salían de los huecos como hormigas del hormiguero para esconderse en el bosque, algunos abandonaron su desayuno, aún caliente, imagino que hasta que nos marchamos del lugar.
Según pobladores de la zona, están trasladando también piedras para moler en otra parte y tierra para la producción de ladrillos; hay grandes pilas de basura, escombros, yaguas y otros desechos como si la zona de Aguas Claras fuera el vertedero municipal. Incluso algunos refieren que vienen “negociantes” siempre “bien ensillados” (con armas blancas) y hacen la compra del preciado metal, cuyo fin, obviamente, es ir a parar a manos de los joyeros.
La Geominera Oriente tiene la perspectiva de abrir, pero, mientras el hacha va y viene, el hachero no está descansando, como dice el refrán popular, sino que hay un impacto ambiental negativo en toda la zona, que no debe suceder. Existen acciones de la PNR, sobre todo en su función preventiva y educativa, pero de acuerdo con lo observado, hay necesidad urgente de medidas más ejemplarizantes.
Que los propietarios actuales hagan valer su derecho y se encarguen de protegerlo, la historia de que la tierra vacía no es de nadie y de que los dueños sean morosos e irresponsables para proteger sus bienes es, en este municipio, la raíz de muchos problemas que comienzan con pequeñas manifestaciones y siempre dejamos que adquieran fuerza antes de intervenir.
Lo más preocupante es precisamente cómo utilizan las sustancias químicas. El mercurio es un metal líquido a temperatura ambiente, inodoro, de color gris plateado, pero a altas temperaturas se transforma en un gas tóxico, la intoxicación es paulatina y puede llevar a procesos de largo sufrimiento. El Cianuro de Sodio es, incluso, mucho más letal y peligroso.
Algunos dedicados a la extracción refieren que todo es más mito que realidad, pues hay que lavar diario más de 200 latas de tierra, excavar como topos y la mayoría de las veces se pasan semanas y meses sin encontrar nada. Ninguno les da importancia a los daños a la salud, tratan el asunto como si fuerauna mentira inventada para alejarlosdel lugar y mucho menos les importa ni valoran el impacto ambiental de su acción, porque afirman depender de ello para sostener a su familia.
Evidentemente, falta conocimiento del riesgo y aún hay carencia de estudios y advertencias acerca de los niveles de mercurio en peces colectados en aguas contaminadas, los peces no mueren sino que consumen pequeñas cantidades de mercurio en el agua y lo transforman en metilmercurio, sustancia peligrosa para la salud de los humanos.
Joel Ronda Pupo, presidentedel Consejo Popular Aguas Claras, afirma: “El trabajo profiláctico hadado frutos porque han disminuido los ilegales pero aún quedan unos cuantos. Venían hasta de otros municipios, era la fiebre del oro. Han encontrado algún poco de mercurio cristalizado dentro de la mina y ellos lo usan y lavan la tierra en los ríos y embalses.
“La situación de las represas delas minas aquí es un problema social y centro de muchas ilegalidades. Cuando llega el verano, la gente cree que esto es un balneario y no comprende que el agua no está buena y que no deben bañase en ella, aún cuando hemos hablado en las reuniones, en los consultorios, de los riesgos de la extracción de oro, el problema continúa”.
Según el Presidente, el agua seutilizaba para regar el organopónico pero ya no se hace porque sedetectó afectación, pero continúa usándose en el riego de plantaciones de yuca, plátano y otros cultivos, porque se evaluó y no existía evidencia de problemas. Considero que lo mejor ante la duda es abstenerse, porque al igual que los humanos, las plantas “son lo que comen”. La yuca, por ejemplo, es una raíz y, como tal, su función es alimentarse del agua y lo que encuentra en el suelo.
Para Liliam Fernández y su hermano Segundo, las cosas resultan diferentes. Desde 1957 viven en la finca heredada de sus padres, justo en medio de la Mina Reina Mercedes. Han tenido afectaciones de todo tipo, muchas provocadas por las ilegalidades de particulares que han abierto tantos hoyos en su finca que ya casi no se puede caminar por ella. Vigilan que no estén, pican lascercas, tumban los árboles y ¡acavar! Durante mucho tiempo el hermano, ahora enfermo, ha calladoamenazas como: “Si hablas te echamos a un hoyo de estos o te ahorca-mos con un alambre de púas”.
En otras ocasiones, sufrieron por las irresponsabilidades de empresas durante la explotación de la mina para extraer Zeolita. La anciana afirma que le derribaron la cerca, extrajeron árboles de madera preciosa y afectaron la tierra y no repusieron nada, aun cuando la Ley de Minas establece la responsabilidad de los concesionarios al respecto. El actual permiso abarca 270 hectáreas, es válido desde el 2 de noviembre del 2010 y aún no hay una respuesta efectiva.
También constatamos la utilización del agua embalsada para el ganado mayor y los cerdos de quienes viven en las proximidades. Este Consejo Popular abarca 82 kilómetros cuadrados y tiene 7 135 habitantes, la mayoría de los pozos están contaminados y muchas de sus aguas y lo que arrastran ellas, va a parar a la presa Cacoyugüín.
Muchos pobladores aseguran que durante años ha existido la extracción y no hay impactos negativos en la salud, pero estos problemas son acumulativos y pueden traer consecuencias graves como la disminución de las capacidades auditivas, de olfato, gusto, tacto, atrofia muscular, alteraciones del aparato digestivo, pérdida del apetito y de peso, daños en los riñones y el hígado, malformaciones e incluso cáncer.
Marilín Arias Rojas, directora de la Policlínica Alcides Pino, área de salud a la que pertenecen muchas de las personas dedicadas a esta actividad ilegal, afirma: “Atendimos al personal dedicado a esto, para buscar intoxicación. Hicimos estratificación, pruebas y exámenes físicos a 634 personas, de ellas 325 eran de nuestro territorio. Hemos dado charlas educativas acerca del mercurio y la afectación a la salud e incluso sobre el oro que también hace daño. De enero para acá hemos realizado 25 acciones de este tipo porque, para nosotros, es un problema de salud en la zona por las implicaciones y los diversos trastornos que puede traer a largo plazo, porque los síntomas y enfermedades pueden ser diversos”.
Para esclarecer el asunto, dialogamos con Alfredo Apud Rodríguez, coordinador de la Oficina Nacional de Recursos Minerales, que atiende las provincias orientales con sede en Santiago de Cuba, quien acota: “Se hizo un programa de desarrollo del oro y los yacimientos más investigados son los que primero se trabajan. Holguín está incluido, pero en esta región el estudio quedó con cierto grado de incertidumbre y por ello se otorga el permiso de investigación. La situación financiera es muy difícil y se avanza en las minas que dan más.
“Hacemos el balance de los yacimientos y se hará en todo el campo aurífero de Holguín. Nuestra oficina puso la moneda nacional para iniciar la investigación, mas el financiamiento en CUC lo pondrá Geominera Oriente, según lo permitan sus negocios. No obstante, como esto es un problema peliagudo para Holguín, hay que responder con mayor celeridad y porque los precios actuales del oro ameritan la inversión”.
En la zona de la mina Agrupada y también en otras hay huellas de camiones, tractores e incluso otros equipos más pesados usados en la extracción ilegal, algunos moradores afirman que hay trasiego de tierra y piedras como si se fueran a pulverizar en otro lugar. De constatarse esto y existir lavado en otras zonas, la contaminación, por pequeña que sea, puede extenderse y de ese modo tener aristas más complejas.
La Ley número 76, Ley de Minas, promulgada el 23 de enero de 1995, establece la política minera del país y las regulaciones jurídicas de dicha actividad para la protección y desarrollo y el aprovechamiento racional de los recursos minerales en función de los intereses del Estado.
Es necesario intervenir de forma inmediata en esas áreas con los organismos competentes y paralizar totalmente esas actividades ilegales, evaluar el nivel de afectación provocado, que el inversionista atienda y controle lo que sucede y haga de una vez por todas el estudio de ingeniería geológica, para evaluar la factibilidad de extraer o no el mineral.
Son muchas las preocupaciones que genera este asunto más allá del matiz económico, social o de salud inmediata o futura. Alarman las consecuencias en la cadena ecológica, las amargas huellas que quedarán para mostrar lo que hicimos con nuestra tierra, en nuestro tiempo. Miremos la reflexión de Fidel del pasado 21 de marzo y analicemos la frase: “Si no aprendemos a comprender, no aprenderemos jamás a sobrevivir”.
Ania Fernández Torres / Periódico Ahora
Muy buen comentario, evidencia de una objetiva investigación sobre un desconocido asunto en nuestra sociedad. Ojalá tan descriptivo trabajo sirva de referencia a los que practican las sintesis.