Con el amor al mundo bien adentro, texto editado por la Casa Editora Juventud Rebelde del homónimo diario cubano, acompañó a la delegación cubana al reciente XIX Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes, que tuvo lugar en la ciudad rusa de Sochi.
El libro toma su nombre de una estrofa de la canción Son los sueños todavía, del cantautor cubano Gerardo Alfonso dedicada al Che, y compila una selección de materiales de informaciones, crónicas, entrevistas y reportajes publicados en Juventud Rebelde para mostrar la historia de estas citas de las juventudes progresistas del orbe.
Varios retos conllevó al colectivo del diario la edición del libro: lograr un equilibrio de trabajos periodísticos representativos de todos los Festivales anteriores, así como llenar un vacío editorial, pues JR se fundó en el año 1965 y el movimiento de los festivales tuvo su génesis en la Praga de 1947, poco después de terminada la Segunda Guerra Mundial.
“¿Cómo abordarlos de forma cronológica si el periódico no existía?, pues en el archivo de JR había materiales sobre esos festivales anteriores al triunfo de la Revolución y anteriores a nuestra fundación, entre ellos, entrevistas a algunos de sus participantes que decidimos aprovechar”, compartió Yoerky Sánchez Cuellar, subdirector del diario.
Sánchez Cuellar dialogó acerca de las tres grandes etapas en las que está divido el texto: una fundacional de 1945 a 1959, donde se habla también del surgimiento de la Federación Mundial de Juventudes Democráticas, organización impulsora de estos eventos; un segundo momento desde 1959 hasta 1989 que cierra el ciclo con el Festival de Pyongyang; y un tercero, hasta la actualidad.
Un criterio constante en cada una de estas segmentaciones cronológicas fue el de reflejar a grandes personalidades de la política mundial y su impronta en el movimiento de los Festivales, como Nelson Mandela, Hugo Chávez, el Che y el líder de la Revolución cubana, Fidel Castro.
“Fidel mantuvo siempre la idea de que la juventud mundial estuviera unida, luchando por la paz”, manifestó el subdirector de JR.
“Cada artículo compilado posee el valor de reflejar el acontecimiento y, cuando los unes tienen un gran valor histórico que sirve de material de estudio. Nuestra idea fue hacer ese regalo a los jóvenes que fueron a Sochi”.
La puerta no está cerrada a futuras actualizaciones e incorporaciones de trabajos sobre esta XIX edición que, dedicada a Fidel y al Che, acogió a más de 20 mil jóvenes de unos 180 países. También, existe un proyecto de llevarlo a libro electrónico y se pueda disfrutar desde teléfonos inteligentes y tabletas electrónicas con todas las prestaciones posibles que ofrece este formato.
UN SELLO EDITORIAL EN CIERNES
El proyecto editorial de Juventud Rebelde se remonta a varios años y ha pasado por varias etapas.
“Hace más de 14 años se comenzaron a publicar trabajos periodísticos de JR convertidos en libros por parte otras editoriales. Esa fue una primera etapa. Posteriormente, se empezaron a hacer coediciones entre otras editoriales, la mayoría con la Casa Editora Abril. Hace algunos años comenzó el sueño de convertirnos en editora de libros por separado” comentó Herminio Camacho Eiranova, subdirector del diario de la juventud cubana.
En estos momentos, compartió el directivo, se encuentran creando un equipo específico que pueda asumir la producción de libros, pues aunque muchas de las funciones del diseño periodístico convergen con las del diseño editorial, ambas tienen características propias.
“Estamos identificado un grupo de proyectos a llevar a cabo a nuestro estilo y con nuestras propias fuerzas, pero no vamos a abandonar las coediciones”. Un vínculo establecido, entre otras, con editoriales como la Abril y la Pablo de la Torriente con títulos como La cuadratura del círculo y La maldición del avestruz.
Camacho Eiranova señaló que el nuevo sello editorial Juventud Rebelde, al que en julio último el Instituto Cubano del Libro le concediera el Número Internacional Normalizado (ISBN, por sus siglas en inglés) lo que reconoce sus potencialidades profesionales para la edición y producción de materiales bibliográficos, promoverá en formato libro a los autores publicados en el periódico para que estos contenidos lleguen a otros lectores, sobre todo al público joven.
Por Yoandry Avila Guerra/ Cubaperiodistas