Los cuatro equipos de trabajo enviados por la prensa avileña para permanecer a tiempo completo en la cayería norte de Ciego de Ávila, han continuado reportando desde allí asuntos relacionados con el brutal paso del huracán Irma sobre esa zona del litoral norte cubano.
Enviados por la Televisión avileña, Radio Surco, la Agencia Cubana de Noticias y el periódico Invasor, ocho colegas han recorrido instalaciones y áreas del Polo Turístico Jardines del Rey, para reportar, in situ, primero los preparativos, luego el paso y ahora la recuperación tras el paso del meteoro por la zona.
Ello ha permitido poner al alcance de radioyentes, televidentes, lectores y cibernautas un apreciable número de materiales, contentivos de la disposición que prevalece entre la reducida cantidad de trabajadores y directivos del sector que permanecen allí, con la misión de proteger el patrimonio turístico, otros recursos de la nación e iniciar las tareas de recuperación hasta que se restablezca el acceso a la cayería por medio del pedraplén y sea posible el arribo de más fuerzas y medios.
Muy sensible ha sido el apoyo de Transgaviota para poder acceder a los distintos lugares de interés informativo, así como la contribución realizada por especialistas del Centro de Gestión de la Empresa de Telecomunicaciones (ETECSA) para facilitar la producción y transmisión de los materiales.
Tal y como muestran las imágenes captadas y transmitidas, Irma causó enormes daños en el patrimonio turístico, instalaciones de otros organismos, redes eléctricas, así como en el entorno natural de la zona.
Impactante es la imagen que muestran el lobby, restaurantes, cafeterías y otras áreas comunes, prácticamente demolidas por la furia del viento en hoteles asentados a lo largo de Cayo Coco y Cayo Guillermo.
Redes sociales, llamadas telefónicas y mensajes electrónicos (mientras hubo comunicación) han confirmado la gratitud de personas que, gracias al trabajo de los colegas de la prensa avilena han seguido, minuto a minuto, las incidencias del huracán, antes, durante y después de su azote.
