Los diputados de la Comisión de Relaciones Internacionales del Parlamento respaldaron hoy, en esta capital, la Declaración del Gobierno Revolucionario, sobre la directiva de política que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió aplicar en relación con Cuba.
En las sesiones previas al noveno período ordinario de la VIII Legislatura, la diputada Yolanda Ferrer Gómez, en nombre de sus colegas, leyó el texto donde se señala que el mandatario torció el rumbo del proceso hacia la normalización de relaciones entre ambos paises, mal asesorado y desinformado acerca de la realidad cubana.
Apunta la declaración aprobada por todos los integrantes de la Comisión, que la decisión de Trump retoma los métodos de una política fracasada, del pasado, y que no solo perjudica al pueblo cubano, sino también los intereses de amplios sectores en la nación norteña.
La nueva política de Trump satisface únicamente a una minoría de origen cubano cada vez más aislada, reseñaron.
Al decir de Ferrer Gómez, los promotores de esta posición olvidan que para el pueblo de Cuba no existe valor más sagrado que la independencia y derecho a construir, sin injerencias externas, su propio futuro.
Nadie puede marcar pautas al pueblo cubano, asegura la declaración.
Añade el texto que en la Isla no se aceptará jamás imposición alguna acerca de normas de conducta o criterios sobre su democracia o el funcionamiento del sistema económico, político y social.
Los parlamentarios compartieron el criterio de las organizaciones de la sociedad civil cuando señalaron que ni presiones e imposiciones harán retroceder a la Mayor de las Antillas en el empeño de edificar una nación independiente, soberana, socialista, democrática, próspera y sostenible.
Cuba es ejemplo en el ejercicio de los derechos humanos, en la participación política de su ciudadanía y de las libertades de todos sus ciudadanos, asevera el documento.
La Comisión agradeció las crecientes manifestaciones de respeto y simpatía hacia Cuba, y las acciones solidarias que han tenido lugar en América Latina, el Caribe y el mundo, en rechazo al retroceso en la política de EE.UU. hacia la Isla.
Un sector cada vez mayor en ese país, entre ellos legisladores, militares retirados, académicos, grupos de solidaridad, hombres de negocios, agricultores, organizaciones no gubernamentales y religiosas, medios de prensa y representantes de la comunidad cubana, se han manifestado a favor de que ambos países continúen avanzando en la mejoría de las relaciones.
En el Palacio de Convenciones de La Habana, donde sesionan las 10 Comisiones Permanentes de la Asamblea Nacional del Poder Popular, los diputados llamaron a los legisladores del mundo a dirigirse al Congreso en Washington y demandar el cese del bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba.
Exigieron los diputados el cese de los programas subversivos del gobierno norteamericano contra la Mayor de las Antillas, la eliminación del financiamiento a mercenarios, y la devolución del territorio ilegalmente ocupado por la Base Naval en Guantánamo.
Apoyaron los miembros de la Comisión la disposición del Gobierno Revolucionario a continuar el diálogo respetuoso que se comenzó con el gobierno de Barack Obama y encausarlo en temas de interés mutuo, sobre la base del respeto y en pie de igualdad entre las dos naciones.
Los diputados de la Comisión de Relaciones Internacionales ratificaron que la convicción de que con la herencia revolucionaria de la generación de Fidel y Raúl, Cuba continuará adelante sin dejarse intimidar por nada ni por nadie.
ACN
