La lluvia del huracán Matthew apenas aparece y el viento ruge, pero como todavía no “muerde” la corriente eléctrica sigue “viva” y me deja estar un rato más conectado al Facebook.
De pronto el chat se abre y una voz estampada en letras me dice: “Hola amigo, reza por los baracoeses”.
“Estoy rezando por todos los afectados”, le respondo y así comenzó una conversación intermitente que me cogió de sorpresa, porque con Baracoa ni la comunicación telefónica se establecía, pero sin embargo la conexión a Internet seguía latente, al menos para mis colegas de la emisora La Voz del Sol y del telecentro PrimadaVisión.
“Ahora: oscuridad total, viento fuerte acabando con todo a su paso, lluvia intensa desbordando todo y mar llevándose el malecón, aunque te cuente esto es poco para describirte lo que aquí pasa en este momento. Los nerviosos se alteran a cada rato, alguna colega llora al pensar en hijos y familia, yo misma estoy muy preocupada por mis padres…”, fue lo próximo que me redactó.
El dolor con que escribía debía ser muy grande, tanto que lograba que lo sintiera en cada línea, y aunque ninguna lágrima salió a brote, los deseos de sacarlas eran infinitas.
Mirna”Esta emisora es una fortaleza. La puerta de la recepción se mantiene abierta todo el tiempo y dentro no se siente ninguna racha. Para sentir el ruido tenemos que salir al portal.
“Oye esto ahora está apretando. Me paré en la puerta de la emisora y una racha trajo el sabor a sal hasta mi boca. No hay nada de información, es mucha la penumbra, ah y el techo del telecentro de aquí se cayó. Acaban de colapsar los teléfonos de aquí, vamos a ver hasta cuando nos acompaña Internet.
“Las paredes de la emisora tiemblan por minutos y de pronto se siente el estruendo de algo que cae. Al paladar del frente creo que le queda poco en pie, muy lamentable. Yo solo pienso en los cabezones de mis padres.
“Aquí estamos velando que el mar no llegue hasta la emisora, nunca ha ocurrido pero… Ahora todo en calma, no llueve, no hay vientos, estamos en el ojo del huracán”, fue lo último que me escribió Mirna Rodríguez, periodista y amiga baracoesa a la que prometí el apoyo necesario, ese que tanta falta les hará cuando al amanecer de este cinco de octubre Baracoa despierte siendo otra.
Así, ávido de información de primera mano, me fui a los muros de muchos que contaban sobre lo que Matthew iba dejando a su paso por doquier. Según encontraba más referencias, mayor era el hincón que oprimía mi pecho. “Eso nos puede pasar a todos y debe ser lo peor”, pensé mientras tragaba en seco.
De la misma emisora, del telecentro y de otros medios guantanameros, varios colegas dejaban huellas sobre su muro del indeseado huracán visitante.
Arelis Alba: “Asusta lo que se escucha detrás de la pared. El sonido del viento es atronador”.
Mavel Toirac Suárez: “Matthew nos afecta y convierte mi primera experiencia como periodista en situaciones de este tipo, en algo inolvidable. Mucho ruido, el techo cae, nos atrincheramos, algunos tienen lágrimas en los ojos, otros se aferran a la cámara para no perder la imagen.
“El custodio como buen cubano exclama ¡Se está acabando el mundo aquí adentro! pero seguimos informando, mediante el teléfono, las redes sociales…. porque sobre todas las cosas somos periodistas en las buenas y en las malas. Muchos no sabemos si nuestras casas están en pie. El amanecer va a ser difícil. Pero lo importante es estar vivo, tener mente positiva y ser fuertes en estos momentos.
“Según las autoridades baracoenses Matthew ha ocasionado afectaciones en los hoteles El Castillo, Rio Miel, La Rusa y La Habanera. Los vientos sostenidos son de 150 km por hora. También se reportan postes caídos e inundaciones.
“Ahora mismo las rachas son muy fuertes, llueve mucho, las olas llegan a cuatro metros y algunas traspasan los cinco niveles de los edificios aledaños a esa zona –se refiere al malecón.
“Hace horas no hay fluido eléctrico en el municipio y se perdió la señal de televisión. Según las autoridades hay cubiertas destruidas, crecida de ríos e incomunicación a través del viaducto La Farola”.3 matthwe baracoa fac
Richard López: “En la emisora de Baracoa no sale la señal de la televisión cubana. Mientras otros esperan que nosotros le digamos algo, nosotros no sabemos lo que dicen los otros más que por Internet.
“El huracán Matthew entró a Cuba por Caleta, en Maisí, y se espera que salga por Mata aquí en Baracoa. Quizás los estragos sean algo menor de lo que esperamos. La ciudad está sin corriente desde las 12 del mediodía, hay lluvias y vientos fuertes, tejas caídas, parte de una pared derrumbada y un poste de madera del tendido eléctrico partido en la parte superior. Es lo que sé de Matthew aquí desde este micromundo del local donde laboro.
“En Baracoa las lluvias arrecian poco a poco y de forma paralela los vientos a causa de los efectos asociados al huracán Matthew. Ya se rumora la caída de una teja en un hogar de La Playa. A las seis de la tarde debe sentirse aquí el comienzo del “ataque en profundidad” del ciclón, que deberemos soportar durante seis horas de suplicio, según cálculos de los especialistas”.
Lilibeth Alfonso: El ingeniero Roberto Rivas nos dice que la situación de Maisí, sobre las 6 y 15 pm, se logró conocer gracias a un radiaficionado de la red de emergencia de la onda corta. A esa hora los vientos eran de 200 km por hora, techos caídos, centros estatales sin techo e intensas lluvias.
“El sitio donde estaba el radioaficionado se quedó in techo y se levantaron las antenas, así que se le orientó resguardarse y cuando restaure vuelve la comunicación.
“Mientras en Baracoa reportan dos radioaficionados que informaron que el Hotel La Rusa perdió el techo, árboles caídos en el parque central, los almacenes de medicamentos de El Turey se quedo sin caballetes y penetraciones del mar e incrementándose los vientos a 187 km por hora. Se están verificando otras informaciones que llegan por otras vías”.
Mara de Labat: “Colapsó el techo del Hotel la Rusa, que desastre…
“También se partió al frente de nuestra planta radial un poste de la línea telefónica. Se estiman vientos de 100 kilómetros hora, según información del Presidente del Consejo de Defensa Municipal, que recibí a través de uno de nuestros colegas de Primada Visión.
“Ahora mismo están volando tejas de todo tipo, de zinc, francesas…Y hace solo algunos minutos se cayó una pared de bloques o culata como se le conoce comúnmente, de una casa en construcción.
“Con agilidad y aprovechando los minutos de calma asociados al ojo de Matthew, una brigada de Bomberos rescatistas, socorrieron a una familia y la trasladaron a una casa de segura”.
Eliannis Legrá: “Esto es indescriptible, casi ni oigo por la presión del aire que se siente. Las paredes retumban, sólo se siente el fuerte viento que nos azota, objetos que chocan contra las paredes o algún estruendo por algo que trajo el viento. Hasta cuándo será esto. Hasta cuándo tendremos que estar con esta incertidumbre por nuestros familiares que no están aquí con nosotros, por nuestra ciudad donde tanto se ha hecho para quedar bonita. Esperemos que todo pase pronto. Deséennos la mejor de las suertes.
“Amigos, el silbido del viento que siento ahora me asusta, no sé lo que hay allá afuera, no quisiera ni saber qué hay. Pero hay una realidad, Matthew está bien potente. Sólo sentimos el sonido del viento y las cosas que caen, que vuelan, yo qué sé. Es eso, sólo eso”.
Claudia Rafaela Ortiz Alba: “Hubo casi una hora y media de una calma que asustaba. Nos dio tiempo para salir a explorar las cuadras contiguas, hay tantos escombros que apenas se puede caminar.
“Ya está retornando la lluvia y el viento fuerte, muy fuerte! en realidad nunca vi nada así. En el tiempito de calma salieron unas brigadas de bomberos a las calles para hacer algún rescate o retirar escombros peligrosos eso no lo sé y nos dijeron que aunque no intentaron no pudieron hacerle la inspección a las casas del malecón porque el agua a dos cuadras arriba apenas los dejaba pasar, dicen que batían las olas como en el mismo muro.
Radio Baracoa: “Estaremos informándoles mientras tengamos conexión, hay postes caídos, se están interrumpiendo las comunicaciones, así que no sabemos qué sucederá en lo adelante. Matthew está ganando en intensidad, dentro de esta planta radial se siente mucha presión, el viento que sopla es muy fuerte. Necesitamos de mucha suerte luego de este fenómeno que nos acecha.
“Mañana Baracoa mostrará un rostro distinto: calles llenas de escombros y restos de árboles, gente con miradas preocupadas y ojos llorosos, manos ágiles que buscan recuperar todo lo que se pueda y mentes activas buscando la solución a los problemas constructivos que dejará Matthew detrás… Así cambia la imagen de una ciudad que hace apenas unos dos meses celebró sus 505 años y vistió muchas de sus instituciones con las mejores galas….la ciudad tendrá el reto de levantarse nuevamente ante el mar y las inclemencias del tiempo”.
Blasones Guantánamo: “Según las pocas comunicaciones que se han tenido con Baracoa se necesitarán muchos recursos y mucha solidaridad para recuperar los daños que está causando el huracán. Maisí, San Antonio e Imías permanecen incomunicados, pero la permanencia e intensidad de las lluvias y los vientos hacen pensar en un gran desastre”.
Por Escrito por Adriel Bosch Cascaret / Periódico Venceremos