Santiago de Chile le vio nacer y regresar después de un tiempo de ser corresponsal en Londres. Sus ojos pequeños y vivaces denuncian una energía que pareciera inagotable. No hay espíritu taciturno que se resista a su distintiva locuacidad. Le gusta nadar. No pierde un minuto para estirar un cuerpo bien plantado y tan ágil, que resulta un desmentido a su edad. Es corredora de diez kilómetros y tiene más de setenta años.
Su padre la imaginaba como dentista, una profesión muy tranquila en la cual podría asegurarle la clínica. Ella decidió por el periodismo. Ahora como le encantan los retos, ha devenido una militante defensora de los derechos de las mujeres. Ha sido electa Presidenta del Congreso de la Asociación Mundial de Mujeres Periodistas y Escritoras, a celebrarse del 23 al 26 de noviembre próximo, en Chile[ii].
“La AMMPE fue ideada por una mujer conocida como Doña Gloria Salas de Calderón[iii] quien en 1969, al salir de la escuela de periodismo en México, halló un mundo tan machista que propuso a otras mujeres organizarse para que pudieran juntarse, de vez en vez, y compartir lo que estaban haciendo por desarticular prácticas patriarcales”.
Así contó Julia Eugenia Martínez durante su exposición en el XII Encuentro Iberoamericano de Género y Comunicación, celebrado del 10 al 12 de mayo de 2016, en La Habana, a propuesta de la Unión de Periodistas de Cuba, con el acompañamiento de la Federación de Mujeres Cubanas y la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales.
La personalidad abierta de Julia la colocó entre las participantes más populares y entrevistadas de la cita. “Yo no tengo categoría y los hombres sí. Adidas discrimina” podía leerse en aquella pancarta que pegó a su espalda, durante una de las carreras organizadas por esa firma que no concebía categoría para mujeres de 70 años y más. “Cuando corrí la carrera protestando, nadie me fotografió, porque usé el arma incorrecta, pues el letrero de protesta iba a mi espalda”.
“Muchos me felicitaban cuando me veían, pues yo iba corriendo sin estar inscripta, no llevaba número porque no quise pagar la inscripción. Cuando pasé por la meta, había muchos fotógrafos y si hubiera llevado el cartel delante, a mí me fotografían, sin dudas hubiera salido en los periódicos, o si yo hubiera tenido ahí, una amiga que me fotografiara con su celular lo socializamos en las redes sociales. Y entonces, Adidas hubiera muerto del susto, pero lo que sucedió fue que Adidas se murió de la risa. Y no me hicieron caso.” _confiesa Julia con una carcajada nacida de aquella lección.
¿Cuáles cree como armas correctas para unirnos en la lucha por los derechos de las mujeres?
Formar redes. Yo tengo una red de running de hombres y mujeres, si yo hubiera tenido esa foto, mi red la viraliza y Adidas se la hubiera visto complicado. Hay que hacer el cuento todo el tiempo. Eso de que Adidas no tiene categoría para las mujeres de 70 y sí, para los hombres, porque dicen que somos pocas, hay que contarlo. Pues aunque seamos una, deben tenerlo. Hay otras muchas instituciones que hacen carreras y la categoría de 60 es la máxima. Si yo vería que para los hombres tampoco hay, bueno yo estoy dispuesta a correr, pero si yo veo que a los hombres sí, y para mí no hay una categoría, ¿porque tengo que aceptarlo?
Paso a paso no aceptar en distintas cosas, pero a veces aceptamos sin darnos cuenta. Al año siguiente me dijeron que sí había categoría pero no habían hecho las medallas, entonces cuando me llamaron porque yo había ganado el tercer lugar, el señor me dice: _ Óigame no hicimos la medalla pero le voy a poner esta otra para la foto. Yo tenía que haber dicho _No. Usted no tiene la medalla. Usted se queda sin la foto. La hacemos cuando la tenga hecha. Y demoramos tres meses en tenerla. Yo acepté que me pusieran otra medalla para sacar la foto porque en el momento una no la piensa.
¿Cómo se sensibiliza y comienza a trabajar por la equidad de género?
Es un camino que estoy iniciando, no soy experta. He visto lo que ocurre, leo los diarios, veo a las mujeres que las matan y veo que hay un machismo tremendo, mucho más fuerte en Chile que él que hay en Inglaterra donde viví muchos años. Por supuesto que quisiera que todo cambiara en mi país y fuera todo más igualitario. Lo había captado pero no estaba entusiasmada con el tema. Me entusiasmé con el tema cuando fui a Ginebra, cuando conocí a Isabel[iv]. Creo que tengo por delante mucho trabajo que hacer. Cómo? No lo sé, va a ir llegando sólo.
De las mujeres periodistas en Chile, ¿qué destacaría?
Hay muchas. Es un trabajo duro, muchos fines de semanas que hay que hacer turnos extras. Fui editora de noticias internacionales en el Canal 7 de televisión nacional. Aunque tú digas, no me lo pague extra, para no trabajar tanto, te dicen, no se puede. Cada dos semanas debes trabajar el fin de semana, y es obligación, porque ley pareja, no es dura. Trabajar en un medio es muy duro, especialmente en la televisión es muy dura. La radio es muy mal pagada.
Yo creo que a uno tiene que entusiasmarle lo que hace. Yo he hecho de todo en el periodismo, he hecho relaciones públicas, he hecho enseñanza y todo es interesante. Es una etapa que te sirve para la otra.
¿Impresiones del evento?
Todo lo que he escuchado me ha parecido interesante, las conversaciones con colegas en el hostal, dan ganas de hacer los cursos que ustedes tienen, dan ganas de regresar al curso de febrero[v].
¿Lo más cercano?
Mi misión ahora, que ese Congreso de la AMMPE en Chile quede muy bien. Luego me tomaré un descansito. Y después, no sé si seguiré en la Universidad. Fui profesora durante muchos años de radio y televisión. De comunicación en educación, cómo usar la radio para la educación. Los primeros pasos de las notas periodísticas. Desde Inglaterra fui corresponsal para un periódico. Pero siempre estoy abierta a lo que venga.
Ahora mi trabajo consiste en alimentar grandes pantallas de televisión que están puestas en todo el edificio de comunicaciones, en la Universidad Católica de Chile. Informo sobre lo que la Facultad y sus estudiantes están construyendo. Premios, programas, seminarios, etc. Soy la editora de estas pantallas y subo entre 9 y 12 informaciones todos los días que lleva audio, video, texto pequeño, foto. El periodismo de hoy es cosa muy cortita.
¿Otro reto el espacio digital?
Lo tuve que aprender. Este trabajo me lo dieron hace dos años, cuando fui por cuatro meses a China. En la Universidad me dijeron si vas a China, ya veremos cuando vuelva que hay para ti. Y yo me dije, me voy a China, de todas maneras aunque no haya nada para mí, me voy para China. Cuando regresé me dijeron, mira tenemos estas pantallas que comunican, que se llama el edificio abierto, comunicando todo lo que va pasando en la Facultad. ¿Crees que podrías aprender el sistema de computación? Soy más lenta que los estudiantes con los videos. Ellos vienen un momentito y me dicen: ya, profesora! Y yo le digo, fantástico! Siempre que pueden, suben trabajos y yo, los reviso. Pero aprendí. Y tenemos que aprender.
¿Sus armas como ser humano?
No tengo miedo. Soy una persona sin miedos. No me importan lo que digan o lo que piensen de mí. Si voy a ir a un lugar, sé que no me va a pasar nada malo. Esa es la gran lección que me dejó mi padre.
¿Qué lecciones le ha dejado el periodismo?
El haberla pasado muy bien. El haber hecho una variedad inmensa de cosas dentro del periodismo, lo he hecho todo y me queda mucho por hacer. A lo mejor este camino del género.
¿Considera que siempre es buen momento para el aprendizaje?
Comencé a correr a los 50 años. Todo el mundo podría decir que a los 50 años ya es muy tarde para empezar a correr y ganar los 10 kilómetros de la maratón. Yo también, era deportista de joven, pero en este deporte, una se pone los zapatos y listo! Cuando empecé a correr a los 50, me dije, voy a correr hasta los 60, entonces empecé a ganar muchas medallas porque había pocas mujeres, cuando pasé los 60, dije que correría hasta los 70 y hoy me digo que correré hasta los 80. Y estoy a punto de cumplir 74.
Nací en una familia con bastantes recursos, no terriblemente altos pero de buenos recursos, de padre y madre deportistas. Tengo condiciones para el deporte, pero lleva entrenamiento. El periodismo comienza cuando salgo de la Universidad. Mi padre decía dos cosas: No tengas miedo a nada y tienes que ir a la Universidad.
Periodismo, ¿por qué?
Porque me gustó contar historias.
Hablar con mucha gente. Quién es periodista, quien va por una vereda y ve a un señor por la otra y cruza la vereda para ir a preguntarle algo. Ah!, ese señor lo conozco pero no me acuerdo del nombre y viro para el otro lado. Así no se es periodista. Periodistas somos quienes vamos siempre con las preguntas a investigar qué. Y es tan interesante investigar qué. Todo el mundo tiene una historia, y parece que tengo esa actitud porque mucha gente se acerca a contarme su historia antes que la pregunte. Lo he pasado muy bien acá.
[i] Sesionó del 10 al 12 de mayo en Kcho estudio Romerillo. Laboratorio para el Arte y en la tarde del 12 de mayo, para la clausura, se unió a la VI Conferencia Internacional Mujer, Género y Derecho organizada por la Unión Nacional de Juristas de Cuba
[ii] Desde 1970 hasta 2012 se han realizado 20 congresos internacionales de AMMPE, con periodicidad bianual en diferentes países (Perú, Estados Unidos, Francia, Taiwán, Chile, México, Israel, Corea, Puerto Rico, Nigeria y España) Los temas abordados han sido diversos: Desde la ética en el ejercicio periodístico y la presencia de la mujer en los medios de comunicación hasta el uso de las nuevas tecnologías y el periodismo ambiental y el vínculo entre el poder político y los medios de comunicación.
[iii] http://ammpemexico.wix.com/ammpemexico#!vstc2=ammpe/vstc1=quienes-somos
[iv] Dra. Isabel Moya, Presidenta del Comité Científico del Evento Iberoamericano de Género y Comunicación y Presidenta de la Cátedra Mirta Aguirre del Instituto Internacional de Periodismo “José Martí”
[v] https://periodismojosemarti.files.wordpress.com/2010/01/programa-iipjm-2015-2016-general.pdf
(Entrevista a Julia Eugenia Martínez, participante en el XII Encuentro Iberoamericano de Género y Comunicación, del 10 al 12 de mayo de 2016, La Habana[i])
